El tradicional Jueves de Comadres se celebró ayer en toda la provincia. La celebración reunió nuevamente a mujeres jujeñas a quienes las une un vínculo de madrinazgo o de amistad en sitios con capacidad limitada y a pesar de las restricciones que provoca la emergencia sanitaria por coronavirus, expresaron su regocijo en la previa del desentierro del carnaval.
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El tradicional Jueves de Comadres se celebró ayer en toda la provincia. La celebración reunió nuevamente a mujeres jujeñas a quienes las une un vínculo de madrinazgo o de amistad en sitios con capacidad limitada y a pesar de las restricciones que provoca la emergencia sanitaria por coronavirus, expresaron su regocijo en la previa del desentierro del carnaval.
En todas las localidades hubo puntos de encuentro elegidos por las comadres, quienes con barbijos multicolores, serpentina, talco y albahaca, acompañadas del canto de la copla, celebraron la llegada del carnaval.
En la capital los restaurantes y clubes fueron los espacios elegidos para cumplir con este ritual carnestolendo de las comadres.
En la ciudad de Humahuaca, en el Salón del Bicentenario y el Anfiteatro Municipal, ambos espacios lindantes al Monumento a los Héroes de la Independencia, fueron los escenarios donde se combinó la degustación de bebidas típicas de la zona como chicha de maní y maíz con múltiples tonadas y versos de coplas que no eludieron el contexto sanitario.
"Decidimos preservar la vida de las personas sin dejar de lado nuestras costumbres y tradiciones", señaló en relación a las limitaciones de los festejos la intendenta del pueblo quebradeño, Karina Paniagua, al dar apertura al encuentro de las hacedoras culturales.
La jefa comunal y coplera eligió dedicarles unos versos a sus compañeras como bienvenida y con caja en mano entonó: "En este día especial//les he venido a cantar//a mis queridas comadres//yo vengo a homenajear", agregó.
Pasado el mediodía y bajo un sol radiante llegó el momento del simbólico topamiento de las comadres que este año fue realizado por Azucena Cari y Silvia González (hermana e hija respectivamente) de las legendarias cantoras Candelaria y Ernestina Cari, quienes siguieron las celebraciones desde sus domicilios.
Durante el característico diálogo, las comadres criticaron las "excesivas" restricciones de circulación, lamentaron los daños que produjo la pandemia de coronavirus.
En ese marco, llegó el momento donde las mujeres -de rodillas y frente a frente- se juramentaron: "Seremos comadres en esta vida y en la otra y nos respetaremos siempre por el bien del ahijado" ante el aplauso cerrado del público presente.
Tras el saludo, dieron rienda suelta a las cantoras populares que se subieron al escenario al aire libre, quienes lucieron su inventiva del canto con caja con mensajes picarescos, reclamos y con versos de amor.
Degustación de chicha
En la ciudad de Humahuaca , en el Salón del Bicentenario, trece chicheras de los pueblos aledaños a la ciudad de Humahuaca, bajo el cumplimiento de protocolos de bioseguridad, hacían degustar a los visitantes y pobladores la ancestral bebida.
“Tengo 78 años y participo desde la primera edición del Festival de la Chicha y de la Copla, lo hago para que esta bebida ancestral que la preparamos con orgullo perdure en el tiempo”, dijo a Simona Martínez, mientras agitaba sus antiquísimos cantaros de chicha.
Nacida en el paraje de Chorrillos, Simona, expresó que entre los churcales enseña a los y las jóvenes a preparar la milenaria bebida que generalmente se comparte, “en el mes de agosto para ofrendar a la Pachamama, en noviembre para recordar a nuestros difuntos y para esta época del carnaval”, precisó.
Las expresiones culturales se replicaron en las cuatro regiones de la provincia de Jujuy en un año especial por la pandemia de coronavirus que evitó los eventos masivos.