El fiscal
Fernando Arrigo pidió ayer penas de hasta once años de prisión para los exsecretarios de Transporte
Juan Pablo Schiavi y
Ricardo Jaime, y para los empresarios de
TBA Sergio Claudio y Mario Cirigliano, por la muerte de 51 personas en la tragedia ferroviaria de Once y la "defraudación" en el manejo de subsidios estatales.
A la vez, reclamó la pena de tres años y ocho meses de prisión para el motorman Marcos Antonio Córdoba, así como inhabilitación de ocho años para conducir trenes.
Así se pronunció el fiscal ayer al mediodía al brindar su alegato ante el Tribunal Oral Federal 2 y la pena más alta que reclamó fue para el exsecretario de Transporte Jaime.
Arrigo pidió diez años y diez meses de prisión para los dos exsecretarios, pero en el caso de Jaime solicitó que se le imponga una pena única de once años, a raíz de una condena previa por sustracción de prueba durante un allanamiento en la investigación por enriquecimiento ilícito.
Además, reclamó la sentencia de diez años y once meses para Sergio Cirigliano y de 10 años y seis meses para su hermano Mario. Para los exfuncionarios y empresarios, el fiscal pidió penas por la defraudación en el manejo de subsidios, así como por el estrago culposo por la muerte de las 51 personas y más de 700 heridos, en tanto que para el motorman sólo por el accidente.
Los alegatos incluyeron el pedido de diez años y seis meses para Pedro Ochoa Romero, y de diez años para Antonio Sícaro, ambos exinterventores de la Comisión Nacional de Regulación de Transporte (Cnrt).
Según el fiscal, quien alegó durante cinco días, los exfuncionarios "debían proteger los bienes del Estado y velar por la seguridad en el transporte que ampara la sociedad".
"Y en ese orden, sus actividades se encontraban indisolublemente ligadas al bienestar de toda la sociedad, lo cual definitivamente irrumpieron", explicó.
El 22 de febrero de 2012 a las 8.32 el tren chapa 16 impactó contra el andén de la estación Once, provocando la muerte de 51 personas y más de 700 heridos.
El fiscal
Fernando Arrigo pidió ayer penas de hasta once años de prisión para los exsecretarios de Transporte
Juan Pablo Schiavi y
Ricardo Jaime, y para los empresarios de
TBA Sergio Claudio y Mario Cirigliano, por la muerte de 51 personas en la tragedia ferroviaria de Once y la "defraudación" en el manejo de subsidios estatales.
A la vez, reclamó la pena de tres años y ocho meses de prisión para el motorman Marcos Antonio Córdoba, así como inhabilitación de ocho años para conducir trenes.
Así se pronunció el fiscal ayer al mediodía al brindar su alegato ante el Tribunal Oral Federal 2 y la pena más alta que reclamó fue para el exsecretario de Transporte Jaime.
Arrigo pidió diez años y diez meses de prisión para los dos exsecretarios, pero en el caso de Jaime solicitó que se le imponga una pena única de once años, a raíz de una condena previa por sustracción de prueba durante un allanamiento en la investigación por enriquecimiento ilícito.
Además, reclamó la sentencia de diez años y once meses para Sergio Cirigliano y de 10 años y seis meses para su hermano Mario. Para los exfuncionarios y empresarios, el fiscal pidió penas por la defraudación en el manejo de subsidios, así como por el estrago culposo por la muerte de las 51 personas y más de 700 heridos, en tanto que para el motorman sólo por el accidente.
Los alegatos incluyeron el pedido de diez años y seis meses para Pedro Ochoa Romero, y de diez años para Antonio Sícaro, ambos exinterventores de la Comisión Nacional de Regulación de Transporte (Cnrt).
Según el fiscal, quien alegó durante cinco días, los exfuncionarios "debían proteger los bienes del Estado y velar por la seguridad en el transporte que ampara la sociedad".
"Y en ese orden, sus actividades se encontraban indisolublemente ligadas al bienestar de toda la sociedad, lo cual definitivamente irrumpieron", explicó.
El 22 de febrero de 2012 a las 8.32 el tren chapa 16 impactó contra el andén de la estación Once, provocando la muerte de 51 personas y más de 700 heridos.