Durante la primera misa en honor a la Virgen del Rosario de Río Blanco y Paypaya, se destinó un espacio especial a un costado del templete para las imágenes que los devotos llevaron con profundo sentido de fe.
Entre ellos estuvo Paulino Flores, junto a su familia y vecinos de San Pedrito, quien trasladó una histórica imagen en urna. "Somos esclavos de la Virgen desde hace muchos años. Esta imagen tiene más de 120 años, perteneció a mis abuelos, luego a mi padre y ahora está conmigo. Cada año peregrinamos para la primera misa y regresamos el 7 de octubre para la fiesta patronal", relató.
Otra de las imágenes fue la de Fanny Cardozo de Burgos, quien llegó desde Palpalá con su familia. "La imagen tiene más de 90 años, era de mi abuela y después de mi madre, que falleció hace dos años. Ahora nosotros continuamos con esta tradición, trayéndola el primer y segundo domingo de octubre. Además le rezamos la novena para culminar en su día", contó.
También se sumó la devoción al Señor del Milagro de José Serrudo, del barrio Mariano Moreno. "Es la primera vez que lo traigo al Santuario. Salí a las cinco de la mañana caminando, pidiendo por los peregrinos, las familias, los enfermos y por la paz en el mundo", dijo y contó que la imagen fue un obsequio.