Con este título la Agencia informativa católica Argentina (Aica) refiere la vivencia de un sacerdote argentino, Jorge Hernández, párroco de la Iglesia Sagrada Familia ubicada en la Franja de Gaza.
inicia sesión o regístrate.
Con este título la Agencia informativa católica Argentina (Aica) refiere la vivencia de un sacerdote argentino, Jorge Hernández, párroco de la Iglesia Sagrada Familia ubicada en la Franja de Gaza.
Los crímenes están aumentando en pequeños, los niños se enferman por el miedo, estrés, ondas de choque y el continuo ruido de bombardeos aéreos, marítimos y terrestres. Hermanas Misioneras debieron abandonar su tarea de rehabilitación de 84 niños discapacitados por efectos de la guerra. La gente me piden no los abandone, y no lo haré. El bombardeo de una casa determinada previamente es comunicado por teléfono a sus habitantes que deben abandonarla, pero al pretender hacerlo el grupo terrorista Hamas les amenaza y participa que deben permanecer como forma de resistencia. No saben qué hacer, sí tienen mucho miedo, viven aterrorizados, ¡si esto es vivir!.
A pesar de estar tan lejos nos llega el dolor, la angustia y desesperación de un pueblo que sufre por el fanatismo de un grupo, la dureza y frialdad de otro, y la indiferencia del mundo frente a tanta sangre inocente derramada. Desde este desconocimiento profundo y detallado del problema, digo, ¿no es hora ya que los palestinos tengan reconocimiento como país independiente, libre y soberano? ¿Acaso no es posible controlar su accionar bélico? Al menos así se hizo con la dura Alemania de la postguerra con tres bases en su territorio, (Francia, Reino Unido y EEUU) ¿cómo es posible entonces no hacerlo ahora?.
"No es progresista pretender resolver los grandes problemas eliminando vidas humanas". Lo dijo nuestro amado Papa Francisco, nunca tan justo para el momento.
Murieron 3 adolescentes judíos a manos de insurgentes, absolutamente intolerable e inaceptable. Como respuesta, se aplica el mismo método que se condena, ahora casi 300 palestinos fueron asesinados, esto es tan inaceptables y repudiables como el hecho anterior.
Volviendo sobre sabias palabras de Francisco, al respecto dijo, "Entre la indiferencia egoísta y la protesta violenta, siempre hay una opción posible: El diálogo". Pero los antecedentes son más antiguos aún, en su difícil camino a la independencia, Gandhi decía: "No hay caminos para la paz, la paz es el camino".
Señor Netanyau, aprenda esto también que es constructivo y humano, si esta es su mejor "política" a aplicar, en el mundo podríamos tomar su receta y..., que poco tiempo nos quedaría para ver el peor final. Que Dios le dé más de inteligencia, misericordia y humanos sentimientos.
José A. Menéndez.