La causa por el doble crimen de Paloma Gallardo y Josué Salvatierra en Florencio Varela, tuvo un importante avance en las últimas horas: una comisión de la Policía Federal Argentina (PFA) viajó a Río Negro, debido a que detectaron que el celular del adolescente de 14 años se activó con otra línea en General Roca, indicaron fuentes del caso.
inicia sesión o regístrate.
La causa por el doble crimen de Paloma Gallardo y Josué Salvatierra en Florencio Varela, tuvo un importante avance en las últimas horas: una comisión de la Policía Federal Argentina (PFA) viajó a Río Negro, debido a que detectaron que el celular del adolescente de 14 años se activó con otra línea en General Roca, indicaron fuentes del caso.
La activación ocurrió el 11 de febrero, según un informe de la Dirección de Asistencia Judicial en Delitos Complejos y Crimen Organizado en la Investigación Criminal (Dajudeco) que solicitó el fiscal Hernán Bustos Rivas, antes de apartarse del caso.
De acuerdo a las fuentes, la versión que dio el hombre no conformó a los investigadores. Dijo que lo había reparado en su local, en agosto pasado, y que no lo usó hasta el día que lo prendió.
Creen que miente o que está encubriendo a un tercero. Sin embargo, no descartan que se trate de un error y que la información que arrojó la pericia no sea la correcta.
El aparato, un Samsung A2 que fue secuestrado, tenía el mismo Imei (Identidad Internacional de Equipo Móvil), precisaron las fuentes. No obstante, podría haber sido clonado.
De todos modos, el hombre fue detenido y esperan su traslado a Florencio Varela, para ser indagado por el fiscal. Al mismo tiempo, allanarán el comercio donde dijo haberlo reparado, adelantaron.
La pericia al aparato también se realizará en Buenos Aires, para saber el recorrido que hizo el dispositivo y cuándo se reseteó.
Desde el inicio, los investigadores confiaron en que la activación de los celulares los guíe hacia el o los autores de los homicidios de los adolescentes de 14 y 16 años, en un descampado de la localidad de Bosques, en la zona sur del Conurbano bonaerense.
En la escena donde encontraron los cuerpos, no hallaron los aparatos, tampoco la bandolera que llevaba Josué y algo de dinero que tenía dentro. Al mismo tiempo, encontraron una piedra con sangre, que habría sido utilizada para golpearlos en la cabeza.
El caso
Paloma Gallardo, de 16 años, y Josué Salvatierra, de 14, eran intensamente buscados desde el 30 de enero pasado, cuando desaparecieron en la localidad bonaerense de Florencio Varela. Sus cuerpos fueron hallados en un descampado cercano al puente de Bosques. Los vio una persona que dio aviso a la Policía Bonaerense.
El sitio queda a pocos minutos a pie de las casas de ambas víctimas, quienes asistían a la misma escuela.
"Ellos tenían encuentros en ese lugar, donde por las noches hay personas en situación de calle. En la escena del crimen se podía notar una especie de cocinas improvisadas y algunas carpitas", indicó una fuente de la investigación.
La autopsia determinó que ambos fueron asesinados con repetidos golpes en la cabeza hechos con una piedra, no fueron atados y a Paloma no la agredieron sexualmente.
En la escena del crimen, los peritos notaron la presencia de "una piedra tipo asfáltica bastante pesada, manchada con sangre", por lo que deducen que fue el elemento con el que les causaron la muerte.