Independiente de Avellaneda, que llegó al récord 26 partidos invicto en su estadio, el "Libertadores de América - Ricardo Bochini", goleó anoche a Nacional de Potosí y de esta manera se quedó con el Grupo A de la Copa Sudamericana.
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Independiente de Avellaneda, que llegó al récord 26 partidos invicto en su estadio, el "Libertadores de América - Ricardo Bochini", goleó anoche a Nacional de Potosí y de esta manera se quedó con el Grupo A de la Copa Sudamericana.
El equipo de Julio César Vaccari venía de ser eliminado por penales en manos de Huracán, dejando trunco el sueño de jugar la final de la Liga Profesional en Santiago del Estero.
Sin embargo, sin tiempo para lamentos, los "rojos" tuvieron que salir al ruedo nuevamente, esta vez por el certamen continental.
El objetivo era ganar o ganar para terminar primero. Enfrente estaba el aguerrido conjunto boliviano que lo había vencido en la ida en la altura de Potosí.
Pero de entrada, de la mano de Montiel y Cabral, Independiente empezó a inclinar la cancha. Y antes del gol de Montiel precisamente, tuvo dos chances netas que no pudo terminar en el fondo de las mallas. Tarzia fue derribado en el área, penal que el arquero Mustafá le contuvo al "7", pero en el rebote anotó de cabeza.
El propio Tarzia aumentó antes de finalizar la etapa y pareció el punto de inflexión del encuentro.
Es que el complemento, la visita intentó adelantar un poco las líneas. Sin embargo, el "diablo rojo" mostró su mejor versión en este semestre y lo pasó por encima.
Así llegaron los festejos de Loyola, Montiel nuevamente y el ingresado Millán. Y continuó atacando ante un Nacional desorientado, sin rumbo, que siempre llegaba tarde.
Encima, la fortuna le jugó en contra cuando Echeverría clavó en contra el sexto y sobre el final, otro que ingresó, el chileno Galdames decretó el séptima con un zapatazo cruzado.
El "rojo" se floreó y sueña, aunque sabe que clasificar a los octavos es sólo el primer paso de varios que debe dar.