Luciano Cachullani, jinete jujeño con raíces en Volcán y residente actualmente en Lozano, viene sorprendiendo a propios y extraños por su desempeño en la 59º edición del Festival Nacional de Doma y Folclore que, desde el 10 de enero se lleva a cabo en el Anfiteatro "José Hernández" de Jesús María, Córdoba. En ese marco, se realiza el campeonato de jineteada a nivel internacional más importante de Sudamérica, donde Cachullani se destaca conservando el primer puesto en la categoría gurupa surera.
inicia sesión o regístrate.
Luciano Cachullani, jinete jujeño con raíces en Volcán y residente actualmente en Lozano, viene sorprendiendo a propios y extraños por su desempeño en la 59º edición del Festival Nacional de Doma y Folclore que, desde el 10 de enero se lleva a cabo en el Anfiteatro "José Hernández" de Jesús María, Córdoba. En ese marco, se realiza el campeonato de jineteada a nivel internacional más importante de Sudamérica, donde Cachullani se destaca conservando el primer puesto en la categoría gurupa surera.
Desde El Tribuno de Jujuy, a través de una comunicación telefónica con el jinete, pudimos sentir su emoción y entusiasmo por el momento tan especial que está viviendo en un espacio con el que soñó desde muy pequeño.
"Hace cuatro años que vengo a Jesús María como jinete, antes vino mi hermano más grande Leandro", comenta Luciano y recuerda que en 2019 salió subcampeón en la misma categoría en la que hoy realiza las montas, "en el 2023 quedé en quinto lugar y ahora voy primero. Todavía quedan tres días de campeonato, ojalá que me toquen lindos caballitos para la monta", expresó, resaltando que es en gurupa surera, en la categoría que se siente más cómodo.
Luciano tiene sus raíces en una familia tradicionalista, que desde siempre cría caballos y se destacan en jineteadas. "Desde que nací estoy con los caballos. Cuando mi hermano era chico mi papá compró una tropilla de petisos a los que nos fuimos subiendo y eso hizo que mi hermano venga varios años a Jesús María. Los petisos que dejaron ellos, de la Tropilla 'La Ponderosa' fueron a los que subí". Con los años vinieron los caballos más grandes, para las jineteadas y los que conformaron la Tropilla "La Misteriosa", siguieron como parte de la práctica que, con la experiencia que va cosechando en estos años, influyen en la demostración de destreza que está admirando a todos en Jesús María.
"Aquí, en Jesús María -continúo Luciano- se encuentran los mejores caballos del país, los más malos", por eso es la exigencia al momento de presentarse en el campo de jineteada. "El primer día monté un caballo de Smith, de la Tropilla La Peligrosa de Buenos Aires, el segundo día uno de Córdoba, el tercero de San Luis y el cuarto, de Buenos Aires y el miércoles subí una linda yegua, para sumar puntos, de una tropilla de Río Negro Buenos Aires. Son caballos muy bravos", indicó Luciano que llamó la atención en estos días también porque para jinetear utiliza una faja que le sostiene el hombro. Al ser consultado el motivo de esta decisión, contó que a raíz de un accidente que tuvo en una jineteada en Diamante, tomó la determinación de fajarse para que no se le salga el hombro.
En cuanto a la preparación que debe cumplir para llegar hoy al estado que llega a Jesús María, el jinete jujeño resaltó que "de domingo a domingo tengo jineteadas, en eso soy constante, y hay una preparación físicamente, por que influye mucho el estado para soportar los golpes de las montas y las caídas, porque son caballos más brutos, más preparados. Lo anímico también es importante, porque por ahí te va mal en una monta y te bajoneas. Es mucha presión lo que se siente, porque es internacionalmente el campeonato más importante de jineteada".
Luciano Cachullani, con la fuerza de todo el pueblo jujeño amante de las jineteadas, seguramente seguirá estos días iluminando el campo del Anfiteatro "José Hernández" con su presencia. Su agenda continuará, hasta donde sabe por ahora, con jineteadas en Calilegua y Abra Pampa.