Después del éxito en Buenos Aires y en Mar del Plata, la puesta llega a Jujuy, en el marco del Tour 2022, que concluirá en octubre. Las entradas están a la venta en norteticket.com y en Belgrano 627.
inicia sesión o regístrate.
Después del éxito en Buenos Aires y en Mar del Plata, la puesta llega a Jujuy, en el marco del Tour 2022, que concluirá en octubre. Las entradas están a la venta en norteticket.com y en Belgrano 627.
"Una semana nada más" es una comedia de Clément Michel, con dirección de Mariano Demaría y producción general de Nicolás Vázquez y Preludio.
Llegan con la ansiedad de una nueva gira, y vuelven a Jujuy.
Arrancamos el tour hace muy poquito. Pudimos volver a Mar del Plata después de lo de Gime (Accardi) para despedirnos como correspondía de esa gran temporada que tuvimos, que fue tan bien, explotando la sala y con tantos premios ganados. Seguimos en Rosario, y de ahí nos vamos a encontrarnos con ustedes. A veces se hace muy difícil llegar hasta tan lejos con las escenografías y todo, pero vale la pena, porque uno se encuentra con un público increíble, con paisajes espectaculares y comida impresionante.
El público jujeño es muy puro. Cada vez que hemos ido, nos hemos encontrado con que nos abrazan.
El elenco y tu producción vienen trabajando muy bien la comedia, llevando mucha alegría al público. "Una semana nada más" es una obra francesa. ¿Cómo eligen la obra?
Así es, es una obra de Clément Michel, que yo la venía persiguiendo hace bastante, desde que hacíamos "El otro lado de la cama". Michel es un autor que me gusta mucho, yo dirigí una obra de él que se llama "El canasto" y donde actuaba mi hermano. Me enamoré de su forma de escribir. Es un autor muy simple, que habla de cosas muy cotidianas, en este caso de la convivencia, de lo que puede suceder en una pareja cuando no se encuentran y son disparejos. Y es lo que sucede acá, mi personaje es muy inmaduro, le gusta mucho todavía todo lo que tiene que ver con los muñecos y con las series, le cuesta crecer, y está enganchado con una adolescencia eterna. Está con una mujer que trabaja y que le va bien, él en cambio no trabaja y vive un poco de ella. Por eso empiezan a haber cortocircuitos en la convivencia, y lo primero que piensa él es en separarse, pero también es cagón y no se anima a decirlo.
Esta fórmula de este trío de actores, que se conocen tanto, debe hacer que sobre el escenario se entiendan solo con miradas…
Sí, tiene otro "power". Es así, nos conocemos más allá del trabajo. En el caso mío con Gime que somos pareja y con Benja (Rojas), que somos muy amigos, como si fuéramos hermanos de la vida que nos elegimos; profesionalmente está esa cosa de que nos conocemos mucho y nos ayuda porque es muy difícil hacer este género. Siempre digo que es más que una comedia, es algo nuevo. Me animé junto al director, Mariano de María, a hacer una sitcom, algo así como "Friends" (serie televisiva norteamericana), pero nunca se hizo en un teatro a nivel mundial. Era un riesgo también, pero yo tenía ganas de darle eso al público. Era mucho más que un vodevil, mucho más que una comedia naturalista, y eso es complicado.
Es como cualquier deporte cuando jugás en equipo, te conocés de memoria, y todo se vuelve mucho más fácil.
Había leído por ahí que esta puesta tiene posibilidades de llegar a Israel más adelante. ¿Es así?
Tenemos muchas ganas de que suceda, pero yo por ahí soy muy entregado a la energía y al destino, y justo en este momento, Israel está teniendo atentados y riesgos, y por ahí es preferible que nos quedemos un poco quietitos. Pero sí, es una obra que tiene muchas posibilidades de ir a Israel y que le vaya bien, porque nos conocen mucho a los tres por los programas que hicimos con Cris Morena. Hasta hay un público que nos viene a ver de Israel a Argentina, es increíble. Eso nos emociona, y ojalá pudiéramos llegar al país de ellos.
NICO VÁZQUEZ, ACTOR Y PRODUCTOR
¿Hasta qué punto esa comodidad de la que hablás, de conocerte con el equipo y de hacer comedia que te gusta, es comodidad?, digo porque en el escenario siempre se pone todo.
A ver, uno está cómodo, como decís vos, pero no por eso uno sale relajado al escenario. Yo siempre digo que cuando uno sale a las tablas, tiene que salir con todo y no subestimar al público. A cada lugar que vamos, siempre le ponemos todo, y siempre es distinto, porque el público te va marcando el tempo de la comedia. Si bien nosotros sabemos dónde se van a reír, y eso te hace sentir "cómodo" entre comillas, siempre hay algo que va a suceder distinto. Hay públicos que son más efusivos, hay otros que son más vergonzosos, pero la están pasando tan bien como los efusivos, y uno tiene que entender y acomodarse.
Y después en lo que tiene que ver con la carrera, yo hoy elijo hacer comedia, elijo subirme a un escenario a hacer reír. Es lo más lindo que me está sucediendo, no solamente por lo que pasa con el público, sino por lo que pasa a mí. Lo que me devuelve el público y no sólo la risa, que al salir de la sala te digan "yo tenía un día muy malo y me lo cambiaste", es algo que no se puede explicar, es mucho más que un trabajo. Y que en este momento me suceda algo así en mi carrera, y que nos suceda como equipo, es increíble. Terminamos la función siempre todos muy emocionados.
Hace diez funciones más o menos que la gente empezó a sacarse el barbijo, y volver a ver las sonrisas, es un volver a vivir.
¿Van a seguir con esta obra una temporada más, o ya están pensando en otra?
Quizás esto completa lo que me preguntaste antes de la comodidad. Quizás vos hablabas de esa comodidad, de saber que salga bien, y seguís, seguís, seguís. Yo soy un tipo que cuando ya cumplió un proceso, me gusta retirarme campeón, en el sentido de que está la cancha llena y te está yendo bien. No me gusta exprimir las cosas hasta el final.
Yo ya tengo en la cabeza lo que viene, y con la idea de redoblar la apuesta, que es tan difícil cuando algo está yendo tan bien. Creo que va a ser después de esta vueltita por el país, que no van a ser tantos lugares, porque gracias a Dios el teatro se reactivó tanto, que hay plazas que están muy llenas.
Vamos a tener una pequeña despedida en Buenos Aires, de ocho funciones en el teatro Ópera, y yo creo que para finales de octubre va a terminar la obra, y voy a descansar unos meses, para volver a debutar con la otra, que la sueño si Dios quiere, para abril de 2023.
¿Con más gente?
Sí, somos más, y seguimos en este género de hacer reír al público.
Ustedes vienen haciendo reír hace ya un tiempo. Después de la pandemia fue como muy necesario para todos volver al teatro y volver a reírnos. ¿Lo ves como un servicio social, al de ustedes?
Estaría mal que yo lo dijera. Si lo dice el público, lo puedo llegar a tomar desde el punto de vista de que les hizo bien. Pero sí puedo decirte que es un motivo más para subirte al escenario. Ver que a tanta gente le sucede esto, después de haberla pasado tan mal, se siente muy bien. Cuando uno logra esto en momentos tan difíciles, por tantos motivos, porque no es sólo la pandemia, bienvenido sea y a seguir haciéndolo.