El ministerio de Salud de Brasil reportó este lunes 113 nuevas muertes por Covid-19, la enfermedad causada por el nuevo coronavirus, llevando el total del país a 2.575, con creces la mayor en toda América Latina.
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El ministerio de Salud de Brasil reportó este lunes 113 nuevas muertes por Covid-19, la enfermedad causada por el nuevo coronavirus, llevando el total del país a 2.575, con creces la mayor en toda América Latina.
Las cifras del fin de semana representan un descenso de 90 muertes en comparación con los días anteriores.
Las autoridades debieron corregir la cantidad horas después de haberla provisto por primera vez, cuando habían informado que la cantidad de decesos ascendía a 383. Aseguraron que la cifra -que hubiera representado un importante salto- se debió a un error de tipeo a la hora de contabilizar los datos de San Pablo: se indicó que había 1.307 muertes, cuando en realidad hay 1.037.
Las cifras del fin de semana representan un descenso de aproximadamente 90 muertes en comparación con los días anteriores, 206 y 204 viernes y jueves, respectivamente. No obstante, esta diferencia suele tener lugar en otros países y se atribuye a demora en la unificación de reportes del fin de semana.
La cantidad de casos positivos no fue corregida: Se mantuvo en 1.927, lo que hizo que el total supere los 40.000, un incremento del 4,9%. En concreto, 40.581. El estado más afectado del país continúa siendo San Pablo, con 14.580 transmisiones y 1.037 muertes. Lo sigue Río de Janeiro, con 4.899 y 422, respectivamente.
"Soy la Constitución"
"Soy la Constitución", exclamó ayer el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, cercado por una mayoría de los gobernadores y varios jueces y congresistas de su país que se unieron para repudiar el acto "antidemocrático" que encabezó el domingo el mandatario ante el Cuartel General del Ejército para pedir la intervención del Congreso y la Justicia.
Las tensiones entre Bolsonaro y las autoridades de los otros poderes y líderes de otras fuerzas otrora aliadas no son nuevas, pero la crisis sanitaria desatada por la pandemia de coronavirus las exacerbó hasta el punto de una confrontación institución explícita que llegó a acercar a este sector con el expresidente y referente de la izquierda, Luiz Inácio Lula da Silva.
Brasil ya suma 2.575 muertos y 40.581 casos confirmados de coronavirus, según las cifras anunciadas ayer por el Ministerio de Salud.
Sin embargo, Bolsonaro continúa acusando a sus detractores de sobrestimar la pandemia -a la que llamó "gripecita"- y pide terminar con el aislamiento social y reabrir la economía.
El último episodio de este cada vez más virulento enfrentamiento por la gestión de la pandemia fue el acto que encabezó Bolsonaro frente al Cuartel General del Ejército en Brasilia para pedir la intervención militar de los dos poderes, el Legislativo y el Judicial.
"Estoy aquí porque creo en ustedes. Ustedes están aquí porque creen en Brasil", manifestó el mandatario sobre una camioneta, en un repetitivo discurso en el que volvió a insistir sobre la lucha contra "la vieja política" y en el espíritu "patriótico" de los brasileños.
El simbolismo del acto marcó un nuevo hito en la escalada política y sumó más dirigentes al frente que activamente se opone a la gestión de salud del mandatario.
"Manifestamos nuestro apoyo al presidente del Senado, Davi Alcolumbre, y de la Cámara de Diputados, Rodrigo Maia, frente a las declaraciones del Presidente de la República, que atacan los principios democráticos", aseguró la "Carta Abierta a la Sociedad brasileña en Defensa de la Democracia", firmada hoy por 20 de los 27 gobernadores y citada por la agencia de noticias EFE.
"Es lamentable que el presidente de la República apoye un acto antidemocrático que afronta la democracia", afirmó más tarde, ante la prensa, Joao Doria, gobernador del estado de San Pablo, el más importante del país.
"Repudio también los ataques al Congreso Nacional y al Supremo Tribunal Federal. Brasil precisa vencer la pandemia y debe preservar su democracia", afirmó Doria, del Partido de la Socialdemocracia Brasileña.
La Asociación de Jueces Federales de Brasil también Advirtió que no tolerará "ningún revés institucional o la violación del orden democrático".
Incluso, un miembro del Supremo Tribunal Federal (STF), el juez Roberto Barroso se pronunció: "Es atemorizante ver manifestaciones a favor de la vuelta del régimen militar. Las dictaduras vienen con violencia, censura e intolerancia, las personas de bien que aman a Brasil no desean eso", dijo según reprodujo la agencia de noticias Ansa.
Pronto se podrían conocer las opiniones del resto de la corte suprema.
El procurador general de Brasil, Augusto Aras, le pidió ayer al STF analice si el mandatario violó la Ley de Seguridad Nacional al encabezar una manifestación que pedía una intervención militar sobre dos poderes del Estado.
"El Estado brasileño admite una única ideología que es la del régimen de la democracia participativa. Cualquier atentado a la democracia afronta a la Constitución y a la Ley de Seguridad Nacional", aseguró Aras en el escrito enviado a la máxima corte del país.
Desde la Cámara de Diputados, su titular, Rodrigo Maia, también repudió al mandatario.
"El mundo entero está unido contra el coronavirus y en Brasil tenemos que luchar contra corona y contra el virus del autoritarismo" lamentó en la misma línea que varios oficiales militares que hablaron bajo condición de anonimato con medios locales.
La unidad de voces, sin embargo, no hizo retroceder a Bolsonaro, quien hoy redobló su ofensiva al identificarse personalmente con la Constitución Nacional.
"La gente normalmente conspira para llegar al poder. Yo ya estoy en el poder. Ya soy presidente de la República. En realidad, soy la Constitución", aseguró en un breve intercambio con periodistas antes de ingresar al Palacio de Alvorada, la residencia presidencial.
Suman 2.575 muertos y 40.581 casos confirmados de coronavirus, según las cifras anunciadas ayer por el Ministerio de Salud.
Chile: vuelta a clases
El presidente de Chile, Sebastián Piñera, anunció un “retorno gradual” de los trabajadores de la administración pública y también de las clases, a partir de mayo, en medio de la crisis sanitaria que atraviesa el país a causa del coronavirus, con más de 10 mil infectados y más de 130 personas fallecidas hasta el momento. El presidente dijo que la pandemia estará unos dos años y anunció que “le hemos pedido a los servidores públicos de la administración del Estado que se reincorporen progresivamente a sus lugares de trabajo, ya que son esenciales”.
Este retorno gradual “excluirá a los trabajadores vulnerables, como adultos mayores, enfermos crónicos, mujeres embarazadas, funcionarios cuyo trabajo, por su naturaleza permita el teletrabajo y otros trabajadores, que lo requieran”. También, el mandatario anunció un “plan gradual de vuelta a clases” en conjunto con el Ministerio de Educación, el cual incluye la postergación de la fecha para el retorno de las clases en el país, programado para el lunes 27 de abril, y unas medidas de protección sanitaria para centros educacionales, estudiantes, profesores, apoderados y el personal educativo.
Paraguay: inmunidad
Las autoridades sanitarias de Paraguay, donde murieron ocho personas por el coronavirus y lo padecen más de 200, plantearon ayer la necesidad de levantar paulatinamente las medidas de confinamiento, aún exponiendo a un posible contagio a los jóvenes para “ganar inmunidad”. El director de Vigilancia del Ministerio de Salud, Guillermo Sequera, defendió en una entrevista con el canal Telefuturo que la sociedad tiene que “enfermarse para poder ganar inmunidad”, una teoría que impulsaron el Reino Unido y los Países Bajos antes de dar marcha atrás por el aumento masivo de contagios y muertos. La propia Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció formalmente que no apoya esta estrategia para enfrentar la pandemia e incluso advirtió sobre sus consecuencias porque aún no existen pruebas de que las personas recuperadas de coronavirus estén completamente inmunizadas.
“No nos conviene frenar del todo la epidemia, porque si frenamos la epidemia lo que estamos haciendo es evitar enfermarnos, que suena bien, pero en algún momento nos vamos a enfermar”, afirmó.