°
28 de Agosto,  Jujuy, Argentina
PUBLICIDAD

Todo llega cuando tiene que llegar

Jueves, 07 de julio de 2016 01:30

Todo llega cuando tiene que llegar

Palabras sabias que solía repetirme mi abuelita Leonor. Claro que cuando me las decía tenía, no sé, seis o siete años, y la necesidad de que todo ocurriera muy rápidamente, y como yo quería. Con el correr de los años esta necesidad no fue cambiando mucho. Seguía queriendo lo mismo y en tiempos a veces muy, muy cortos. Creer que algo nos llegó en el momento que no era, es simplemente un juego de nuestro ego. Todo, absolutamente todo es perfecto y llega a nuestra vida por alguna razón en el momento que es. Lo importante es aprender a recibirlo como es y no juzgarlo creyendo que estamos en el lugar o el momento equivocado. Aprender a crear los momentos para recibir oportunidades es también un poder que tenemos en nuestras manos y si reconocemos con nuestro corazón y aceptamos el momento, estaremos creando un mejor momento para recibir algo más grande y poderoso. Seamos firmes en nuestras actitudes y perseverante en nuestros ideales. Pero seamos pacientes, no pretendiendo que todo nos llegue de inmediato. Hacé tiempo para todo, y todo lo que es tuyo, vendrá a tus manos en el momento oportuno. Aprendé a esperar el momento exacto para recibir los beneficios que reclamás. Esperá con paciencia a que maduren los frutos para poder apreciar debidamente su dulzura. Dejá ir lo que no pertenece a este momento, déjalo ir con amor y sin sentir que perdiste algo. Debemos saber que el aceptar las cosas tal y como llegan a tu vida es un triunfo de tu corazón. Así como recibís con los brazos abiertos deja ir también con los brazos abiertos, con amor y sin lamentos. Cada momento es sagrado y cada cosa que te llega también, acéptalos tal y como son y viví la vida que realmente te merecés. Hasta la próxima. Namasté.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Todo llega cuando tiene que llegar

Palabras sabias que solía repetirme mi abuelita Leonor. Claro que cuando me las decía tenía, no sé, seis o siete años, y la necesidad de que todo ocurriera muy rápidamente, y como yo quería. Con el correr de los años esta necesidad no fue cambiando mucho. Seguía queriendo lo mismo y en tiempos a veces muy, muy cortos. Creer que algo nos llegó en el momento que no era, es simplemente un juego de nuestro ego. Todo, absolutamente todo es perfecto y llega a nuestra vida por alguna razón en el momento que es. Lo importante es aprender a recibirlo como es y no juzgarlo creyendo que estamos en el lugar o el momento equivocado. Aprender a crear los momentos para recibir oportunidades es también un poder que tenemos en nuestras manos y si reconocemos con nuestro corazón y aceptamos el momento, estaremos creando un mejor momento para recibir algo más grande y poderoso. Seamos firmes en nuestras actitudes y perseverante en nuestros ideales. Pero seamos pacientes, no pretendiendo que todo nos llegue de inmediato. Hacé tiempo para todo, y todo lo que es tuyo, vendrá a tus manos en el momento oportuno. Aprendé a esperar el momento exacto para recibir los beneficios que reclamás. Esperá con paciencia a que maduren los frutos para poder apreciar debidamente su dulzura. Dejá ir lo que no pertenece a este momento, déjalo ir con amor y sin sentir que perdiste algo. Debemos saber que el aceptar las cosas tal y como llegan a tu vida es un triunfo de tu corazón. Así como recibís con los brazos abiertos deja ir también con los brazos abiertos, con amor y sin lamentos. Cada momento es sagrado y cada cosa que te llega también, acéptalos tal y como son y viví la vida que realmente te merecés. Hasta la próxima. Namasté.

PUBLICIDAD
PUBLICIDAD