Argentina se impuso hoy a la madrugada cinco a cero a Panamá por la segunda fecha del Grupo D de la Copa América Centenario y de esta manera obtuvo el pasaporte a los cuartos de final. El partido se jugó en el estadio Soldier Field de Chicago, Estados Unidos, y los goles fueron convertidos por Nicolás Otamendi, "Lio" Messi (3), quien entró en el complemento. Su ingreso fue determinante. Cerró la cuenta "Kun" Agero, que también ingresó en el ST. Al inicio un centro perfecto de Di María cayó en el corazón del área y de cabeza Otamendi abrió la cuenta. Se pensó que a partir de allí, el seleccionado nacional se luciría, pero no fue así. Los panameños, que sufrieron la expulsión de Godoy, redoblaron esfuerzos para equiparar el trámite y tuvo dos chances claras. Primero un zapatazo de Quintero que obligó a esforzarse al arquero Sergio Romero y luego un tiro libre de Pérez también encontró una feliz respuesta del "Uno" argentino.
La lesión de Di María generó más incertidumbre. El ingreso de Lamela no influyó demasiado porque el equipo nacional continuó sin rumbo, corriendo mucho más que pensando. Cuando se reanudó el juego, nuevamente el cuadro de Gerardo Martino sorprendió desde el inicio con un tiro rasante que casi Baloy metió en contra su valla y un "mano a mano" increíble que desperdició Higuaín, ingresando solo por el medio. Martino se dio cuenta que sus dirigidos no hacían pesar el hombre de más y por tal motivo no dudó en enviar a la cancha al mejor del mundo: Lionel Messi. El rosarino, recuperado de un fuerte golpe, comenzó a manejar los hilos. Y fue Messi quien capturó un rebote en el área y definió a pura jerarquía. El dos a cero sentenció la historia. Luego el astro de Barcelona, de tiro libre, puso el tercero y un rato más tarde, el cuarto. Al final, el ingresado Agero puso cifras definitivas.
La lesión de Di María generó más incertidumbre. El ingreso de Lamela no influyó demasiado porque el equipo nacional continuó sin rumbo, corriendo mucho más que pensando. Cuando se reanudó el juego, nuevamente el cuadro de Gerardo Martino sorprendió desde el inicio con un tiro rasante que casi Baloy metió en contra su valla y un "mano a mano" increíble que desperdició Higuaín, ingresando solo por el medio. Martino se dio cuenta que sus dirigidos no hacían pesar el hombre de más y por tal motivo no dudó en enviar a la cancha al mejor del mundo: Lionel Messi. El rosarino, recuperado de un fuerte golpe, comenzó a manejar los hilos. Y fue Messi quien capturó un rebote en el área y definió a pura jerarquía. El dos a cero sentenció la historia. Luego el astro de Barcelona, de tiro libre, puso el tercero y un rato más tarde, el cuarto. Al final, el ingresado Agero puso cifras definitivas.
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Argentina se impuso hoy a la madrugada cinco a cero a Panamá por la segunda fecha del Grupo D de la Copa América Centenario y de esta manera obtuvo el pasaporte a los cuartos de final. El partido se jugó en el estadio Soldier Field de Chicago, Estados Unidos, y los goles fueron convertidos por Nicolás Otamendi, "Lio" Messi (3), quien entró en el complemento. Su ingreso fue determinante. Cerró la cuenta "Kun" Agero, que también ingresó en el ST. Al inicio un centro perfecto de Di María cayó en el corazón del área y de cabeza Otamendi abrió la cuenta. Se pensó que a partir de allí, el seleccionado nacional se luciría, pero no fue así. Los panameños, que sufrieron la expulsión de Godoy, redoblaron esfuerzos para equiparar el trámite y tuvo dos chances claras. Primero un zapatazo de Quintero que obligó a esforzarse al arquero Sergio Romero y luego un tiro libre de Pérez también encontró una feliz respuesta del "Uno" argentino.
La lesión de Di María generó más incertidumbre. El ingreso de Lamela no influyó demasiado porque el equipo nacional continuó sin rumbo, corriendo mucho más que pensando. Cuando se reanudó el juego, nuevamente el cuadro de Gerardo Martino sorprendió desde el inicio con un tiro rasante que casi Baloy metió en contra su valla y un "mano a mano" increíble que desperdició Higuaín, ingresando solo por el medio. Martino se dio cuenta que sus dirigidos no hacían pesar el hombre de más y por tal motivo no dudó en enviar a la cancha al mejor del mundo: Lionel Messi. El rosarino, recuperado de un fuerte golpe, comenzó a manejar los hilos. Y fue Messi quien capturó un rebote en el área y definió a pura jerarquía. El dos a cero sentenció la historia. Luego el astro de Barcelona, de tiro libre, puso el tercero y un rato más tarde, el cuarto. Al final, el ingresado Agero puso cifras definitivas.
La lesión de Di María generó más incertidumbre. El ingreso de Lamela no influyó demasiado porque el equipo nacional continuó sin rumbo, corriendo mucho más que pensando. Cuando se reanudó el juego, nuevamente el cuadro de Gerardo Martino sorprendió desde el inicio con un tiro rasante que casi Baloy metió en contra su valla y un "mano a mano" increíble que desperdició Higuaín, ingresando solo por el medio. Martino se dio cuenta que sus dirigidos no hacían pesar el hombre de más y por tal motivo no dudó en enviar a la cancha al mejor del mundo: Lionel Messi. El rosarino, recuperado de un fuerte golpe, comenzó a manejar los hilos. Y fue Messi quien capturó un rebote en el área y definió a pura jerarquía. El dos a cero sentenció la historia. Luego el astro de Barcelona, de tiro libre, puso el tercero y un rato más tarde, el cuarto. Al final, el ingresado Agero puso cifras definitivas.
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