Fabián Rossi, exmarido de la vedette Iliana Calabró, aseguró ayer ante el juez federal Sebastián Casanello que no conoce al empresario Lázaro Báez y que en la financiera SGI solo "servía café" y se encargaba de ir "al supermercado".
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Fabián Rossi, exmarido de la vedette Iliana Calabró, aseguró ayer ante el juez federal Sebastián Casanello que no conoce al empresario Lázaro Báez y que en la financiera SGI solo "servía café" y se encargaba de ir "al supermercado".
En el marco de la causa por lavado de dinero en la que está detenido el dueño de Austral Construcciones, Rossi presentó un escrito ante Casanello, luego de aparecer en las imágenes de la financiera conocida como "La Rosadita" contando dinero junto a personas del entorno del empresario.
"No conozco ni nunca he visto siquiera, ni Austral Construcciones S.A., ni ninguna empresa a él vinculada (Báez)", explicó Rossi en el documento que dejó en el juzgado, previo a la declaración de Leonardo Fariña.
También, dijo desconocer a Martín Báez, hijo del empresario, con quien afirmó que coincidió "circunstancialmente en un mismo espacio de las oficinas" de SGI.
"No lo conocía (a Martín Báez), y no tuve relación ni trato alguno con él, más allá de coincidir circunstancialmente en un mismo espacio de las oficinas de SGI, donde lo vi tres veces. Yo no armo sociedades, no es ni fue mi función ni tiene nada que ver con nada a lo que yo me haya dedicado en mi vida profesional", subrayó.
Sobre su presencia en la financiera de Puerto Madero, Rossi reconoció que estuvo allí "ayudando a contar dinero a los empleados de tesorería", algo que hizo varias veces.
Rossi recordó que para 2010 quiso cambiar un cheque diferido con el que le habían pagado un trabajo y contactó a Gustavo Fernández, presidente de SGI, quien le "merecía confianza", y así fue como terminó desembarcando en un trabajo en ese lugar.
"Realmente es infundado y temerario afirmar que conozco o que tengo estrecha relación con Lázaro Báez, cuando ni lo conozco, ni jamás lo vi en mi vida, ni jamás hablé con él", indicó.
Por último, enfatizó que "las imágenes por sí solas no prueban absolutamente nada" y resaltó: "No aparezco en ellas cometiendo delito alguno, ni preparando siquiera la comisión de delito alguno, ni ayudando a un tercero a la comisión de delito alguno".