El presidente Mauricio Macri aseguró que la reunión que mantuvo con los líderes de las tres facciones de la CGT "fue positiva", aunque los sindicalistas definieron al encuentro como "muy poco alentador".
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El presidente Mauricio Macri aseguró que la reunión que mantuvo con los líderes de las tres facciones de la CGT "fue positiva", aunque los sindicalistas definieron al encuentro como "muy poco alentador".
El mandatario explicó que, a pesar de los cuestionamientos, la reunión fue "positiva", en el marco de una "etapa de ordenamiento que ha sido tan dura sobre todo a los que menos tienen", en alusión al aumento generalizado de precios.
Incluso, el jefe de Estado sostuvo que instó a que "los líderes gremiales en cada uno de sus sectores garantice que cada argentino tenga trabajo" y los convocó a "ser protagonistas de un país con eje en la productividad".
"Todos tenemos que hacer un máximo esfuerzo para poder crecer y los invité ser protagonistas de esa Argentina que tiene que tener su eje en la productividad", subrayó el jefe de Estado. En ese sentido, comentó que durante el encuentro con los sindicalistas recordó que el general Juan Domingo "Perón dijo que la estrella polar de un país tiene que ser la productividad y explicaba que cada uno tiene que ser solidario con el otro y hacer su trabajo lo mejor posible", por lo que agregó: "A eso los invité".
"Es lógico que todos tengamos incomodidades", reconoció Macri, pero indicó que en la Residencia Presidencial de Olivos convocó a los gremialistas a "ser parte de este proceso de crecimiento".
Sin embargo, en el sindicalismo manifestaron que "el encuentro fue muy poco alentador", ya que resaltaron que "los problemas se han agravado y hace falta equilibrar con los intereses de los trabajadores", manifestó el secretario general de la Catt, Juan Carlos Schmid.
"Seguimos en nuestra postura y reiteramos la agenda llevada al Congreso", agregó el también líder del del Sindicato de Dragado y Balizamiento, uno de los que asistió a la reunión con Macri.
En tanto, el diputado nacional y titular del sindicato de canillitas, Omar Plaini, expresó que esperan que el Gobierno "entienda que alguna medida tiene que tomar para que no haya despidos y también retrotraerse de algunos que son injustos, porque eso agudiza el conflicto social". "Le planteamos nuestra preocupación al Gobierno para que nos de una respuesta. El Gobierno se compromete en algunas cosas pero queremos respuestas más concretas. Aspiran que en el segundo semestre baje la inflación y se pueda encontrar respuestas, pero nosotros vemos que si la inflación baja como producto de la recesión entonces el problema continua", agregó. El Presidente había recibido el pasado miércoles por segunda vez en la Quinta de Olivos a los líderes de las CGT Azopardo, Hugo Moyano; de la Alsina, Antonio Caló; de la Azul y Blanca, Luis Barrionuevo.
También los secretarios generales de Empleados de Comercio, Armando Cavalieri; de la Uocra, Gerardo Martínez; de Obras Sanitarias, José Luis Lingeri, ; de Upcn, Andrés Rodríguez; y de Uatre, Gerónimo Venegas.
Sin brindar declaraciones a la prensa, los sindicalistas se retiraron de la Residencia Presidencial y, como resultado, el Gobierno anunció su compromiso de aumentar los montos del seguro de desempleo (que está congelado en 400 pesos), razón por la cual convocó al Consejo del Salario para los primeros días de mayo: se definirá allí la suba del salario mínimo vital y móvil, que es hoy de 6.060 pesos.
Las demandas que no fueron atendidas, en cambio, pasan por la reforma integral del Impuesto a las Ganancias, que Macri ratificó que deberá esperar hasta el año que viene para entrar en vigencia, y el pedido de universalización de las asignaciones familiares, entre otros puntos.