Maryam de Belén Baouardy (1846-1878), fundadora en Belén del primer convento carmelita de Palestina, y Marie Alphonsine Ghattas (1843-1927), cofundadora de la congregación de las hermanas del Rosario de Jerusalén, serán nombradas santas por el Papa Francisco en una misa hoy en la plaza de San Pedro del Vaticano. Una delegación de unas 2.000 personas, principalmente de iglesias locales, viajó a Roma con motivo de la doble canonización, provenientes de territorios palestinos, de Israel y de Jordania.
Desde hace más de dos años, el Vaticano se ajusta a la fórmula decidida por Naciones Unidas, que admitió en noviembre de 2012 a Palestina como Estado observador, lamentando que no exista aún realmente como tal.
Le Santa Sede, que mantiene relaciones con Israel desde 1993, negocia también desde 1999 un acuerdo sobre los derechos jurídicos y patrimoniales de las congregaciones católicas en el Estado hebreo, en particular sus exoneraciones fiscales. Sin embargo, cada encuentro semestral se salda con un fracaso.
Desde hace años, el Vaticano realiza un ejercicio diplomático delicado entre Israel y los palestinos, al haber comunidades católicas implantadas de ambos lados de esta cuna del cristianismo que sigue siendo un importante lugar de peregrinación.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla
Maryam de Belén Baouardy (1846-1878), fundadora en Belén del primer convento carmelita de Palestina, y Marie Alphonsine Ghattas (1843-1927), cofundadora de la congregación de las hermanas del Rosario de Jerusalén, serán nombradas santas por el Papa Francisco en una misa hoy en la plaza de San Pedro del Vaticano. Una delegación de unas 2.000 personas, principalmente de iglesias locales, viajó a Roma con motivo de la doble canonización, provenientes de territorios palestinos, de Israel y de Jordania.
Desde hace más de dos años, el Vaticano se ajusta a la fórmula decidida por Naciones Unidas, que admitió en noviembre de 2012 a Palestina como Estado observador, lamentando que no exista aún realmente como tal.
Le Santa Sede, que mantiene relaciones con Israel desde 1993, negocia también desde 1999 un acuerdo sobre los derechos jurídicos y patrimoniales de las congregaciones católicas en el Estado hebreo, en particular sus exoneraciones fiscales. Sin embargo, cada encuentro semestral se salda con un fracaso.
Desde hace años, el Vaticano realiza un ejercicio diplomático delicado entre Israel y los palestinos, al haber comunidades católicas implantadas de ambos lados de esta cuna del cristianismo que sigue siendo un importante lugar de peregrinación.
PUBLICIDAD