Un hombre fue condenado a la pena de seis años de prisión por ser autor penalmente responsable de los delitos de "abuso sexual simple (dos hechos) agravado por el vínculo y aprovechamiento de la situación de convivencia preexistente con menor de 18 años en concurso real", ilícitos perpetrados contra su hija, menor de edad, en la ciudad de San Pedro de Jujuy.
En tanto, fue absuelto por el beneficio de la duda de otros delitos de "abuso sexual y promoción a la corrupción de menores agravada", por los que también fue imputado en la etapa investigativa y sometido a juicio.
La sentencia fue emitida en la sala de audiencias de la Oficina de Gestión Judicial, por el Tribunal Colegiado integrado por los Jueces con Función de Juicio Alejandra Tolaba (presidente de trámite), Felicia Barrios y Mario Ramón Puig.
Los jueces además resolvieron mantener el alojamiento del procesado en el Servicio Penitenciario y le impusieron la prohibición de contacto por cualquier vía (llamadas, mensajes, WhatsApp, redes sociales, etc.) con la víctima, por si o por interpósita persona.
Asimismo, ordenaron que una vez firme y consentida la sentencia se obtengan los perfiles genéticos del condenado para su incorporación al Registro Nacional de Datos Genéticos vinculados a Delitos Contra la Integridad Sexual.
Sobre los hechos
Según la acusación de la Fiscalía, el hombre fue condenado por hechos cometidos contra su hija, menor de edad, con la que convivía.
El primero de ellos ocurrió en 2021, cuando el acusado se trasladó hacia el monte junto a su víctima, quien contaba con la edad de 11 años, para abusar sexualmente de la misma. En esas circunstancias no pudo hacerlo dado que la víctima se resistió mediante patadas y por la presencia de personas en cercanías del lugar.
Otro de los hechos sucedío entre el año 2022 y 2023, cuando la víctima tenía 13 años y se encontraba descansando junto a su hermana en una de las habitaciones del domicilio, donde ambas convivían con el acusado.
Allí, el imputado abusaba sexualmente de la niña mediante tocamientos en sus partes íntimas, siendo rechazado por la víctima mediante patadas.
Como fiscal ante el Tribunal se desempeñó Juan Carlos Baiud, mientras que el abogado querellante fue Joaquín Campos, del Centro de Asistencia a la Víctima.
Por su parte, el acusado fue defendido técnicamente por la Dr Sara Ruth Cabezas.