POR MAURO RODRIGUEZ
Cinco mujeres fueron asesinadas en la provincia durante este año y por ello, un hombre fue declarado culpable (aunque resta conocer la pena); dos están detenidos y procesados por femicidio, y dos se quitaron la vida tras cometer el crimen.
El primer hecho que sacudió a la comunidad jujeña ocurrió la tarde del sábado 3 de mayo, en un sector del río Las Pavas, en la localidad de Pampa Blanca, donde Adrián Oscar Ochoa (25) llevó en su motocicleta a Angelina Gonzáles, quien en ese momento tenía solo 15 años. Allí, la atacó a golpes, la estranguló y ocultó el cuerpo con tierra y vegetación.
Al día siguiente Ochoa, que se encontraba internado tras intentar quitarse la vida, confesó el crimen y dio la ubicación exacta de dónde había dejado el cuerpo de la víctima.
La Justicia declaró la responsabilidad penal de Adrián Ochoa el pasado 15 de diciembre y, al cierre de este anuario, se aguarda una nueva audiencia donde se le impondrá el monto de pena que deberá cumplir, y que sería la de prisión perpetua.
La tarde del 11 de mayo, Sergio Damián Tejerina (37) asesinó a puñaladas a su expareja Paola Vargas (31) en un domicilio de la calle Juan Ruiz de las 47 Hectáreas, del barrio Alto Comedero de la capital jujeña.
En la casa se encontraba su hijo de 8 años que escapó y fue contenido por vecinos. Mientras que el hijo mayor de Vargas, de 18 años en ese momento, intentó defender a su madre pero fue golpeado y herido con un arma blanca.
Luego, con la presencia de efectivos afuera del inmueble, Tejerina roció con nafta parte del lugar, prendió fuego y se quitó la vida.
El mismo mes, entre la noche del 24 y la madrugada del 25, Jairo "Diego Castro" Guerrero (25) asesinó y descuartizó a Tamara Fierro (29), en el interior de su vivienda ubicada en el barrio 23 de Agosto de la ciudad de Fraile Pintado. Luego, con la complicidad de dos hombres más, trasladó sus restos en una carretilla, hasta un microbasural, ubicado a menos de 300 metros de la casa, donde los calcinó.
El juicio por el femicidio comenzará el 4 de febrero del próximo año, donde Guerrero y sus cómplices serán juzgados por un Tribunal, en el Centro Judicial de la ciudad de San Pedro.
A fines de septiembre, Benjamín Lautaro Mayo (19) asesinó de 14 puñaladas a su madre, María Isabel Elgas (56), en el domicilio donde convivían, ubicado en el barrio El Chingo de la capital. Mayo convivió 17 días con el cuerpo, hasta que el 14 de octubre fue descubierto por vecinos que acudieron al lugar para sofocar un incendio que él mismo había provocado.
Mayo salió del lugar en un automóvil, chocó en una baranda del puente San Martín, descendió y saltó al lecho del río Grande, provocándose la muerte.
Entre la noche del 10 de noviembre y la madrugada del 11, Matías Manuel Tinte (36) asesinó a puñaladas a su expareja, Daniela Araceli Mamani (31), en un inquilinato donde vivía la mujer, ubicado en el barrio Gorriti de la capital.
A la mañana, tras el crimen, Tinte se presentó en la Seccional 1° y confesó a los efectivos: "Cometí un error, mate a mi ex". Desde ese momento, permanece detenido, procesado por el femicidio y se espera la elevación a juicio.
