LIBERTADOR (Corresponsal). Con una gran convocatoria y un clima cargado de entusiasmo, ayer se llevó a cabo la cuarta edición de la Expo Emprendamos 2025 en el Centro de Visitantes Ledesma, donde estudiantes de distintos establecimientos presentaron sus propuestas finalistas dentro del Programa Emprendamos.
La jornada reunió a alumnos, docentes y público en general, además de un jurado integrado por referentes del ámbito académico, empresarial y social: Delia Cruz (Facultad de Ingeniería, Unju), Claudia Lamas (empresa Blimop), Ingrid Carretero (Dirección Provincial de Relaciones con la Sociedad Civil), José Tasquer (Gerencia de Campo de Ledesma) y Fiorella Postiglioni (Fábrica de Papel de Ledesma).
La apertura estuvo a cargo de Federico Gatti, en representación de la empresa Ledesma, y de Nicolás García, de la Fundación Logos, que acompaña el programa.
Entre los proyectos destacados, el primer premio quedó en manos de estudiantes del Colegio Técnico "Ing. Herminio Arrieta" (Etha), quienes presentaron Auricalm, una propuesta pensada para mejorar el bienestar de niños con autismo mediante auriculares diseñados para disminuir ruidos intensos sin generar aislamiento total. El dispositivo permite también reproducir música relajante y audios de contención emocional, a la vez que se conecta por Bluetooth a una aplicación que registra estadísticas de uso y comportamiento, insumo de valor para familias y profesionales.
El equipo ganador lo integró Florentina Patiño, Guadalupe Yapura, Pascual Ucci, Victoria Resua y Tiziano Lima, estudiantes de la modalidad Gestión y Administración de las Organizaciones. Su trabajo combinó tecnología, sensibilidad social y una mirada inclusiva que conquistó al jurado.
Auricalm fue desarrollado bajo la guía de los docentes Ramón Sotelo, Orlando Rivera y Andrea González, en el marco de una propuesta institucional que busca fortalecer el espíritu emprendedor y acompañar a los jóvenes en la creación de soluciones con impacto real en la comunidad.
Los organizadores dijeron que esta nueva edición volvió a demostrar que la innovación y el compromiso social pueden ir de la mano cuando se brinda a los estudiantes un espacio para pensar, crear y transformar su entorno.