En medio de gritos y amenazas en el recinto del segundo piso del Palacio de Tribunales, el Tribunal en lo Criminal Nº 2 resolvió absolver a la empresaria Natalia Cammuso y al entonces personal jerárquico Fabiana Pereyra, Sergio Sosa y Martín Aragón de los delitos por los que llegaron a estas instancias judiciales, por la muerte de la empleada de un call center Elisabeth del Valle Pérez, quien falleció en octubre de 2020, luego de permanecer casi un mes internada en sala de cuidados intensivos de una clínica privada.
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En medio de gritos y amenazas en el recinto del segundo piso del Palacio de Tribunales, el Tribunal en lo Criminal Nº 2 resolvió absolver a la empresaria Natalia Cammuso y al entonces personal jerárquico Fabiana Pereyra, Sergio Sosa y Martín Aragón de los delitos por los que llegaron a estas instancias judiciales, por la muerte de la empleada de un call center Elisabeth del Valle Pérez, quien falleció en octubre de 2020, luego de permanecer casi un mes internada en sala de cuidados intensivos de una clínica privada.
Los jueces absolvieron a los cuatro imputados por falta de acusación fiscal por el delito de "amenazas coactivas", por el beneficio de la duda del delito de "violación de medidas contra epidemias y sobre Cammuso se declaró la nulidad parcial del delito de "homicidio simple con dolo eventual".
Cabe recordar que en la producción de los alegatos celebrados la semana pasada, los fiscales de Cámara Diego Cussel y Alejandro Gurrieri solicitaron la pena de nueve años de prisión para Cammuso y 18 meses para los otros tres imputados.
Por disposición del Tribunal en lo Criminal Nº 2, en las audiencias del debate oral y público, no se permitió el ingreso de la prensa, solo ingresó en la producción de los alegatos y en la lectura de la parte dispositiva del fallo.
Pero de todos modos nuestro diario pudo saber que prestaron declaración testimonial 18 personas y la defensa de los imputados solo utilizó como coartada, la declaración de dos de ellos, mientras que los 16 restantes, fueron contundentes en declarar las condiciones en que trabajaba Pérez y sus compañeros en plena pandemia, en el predio del exclub Alto Castañeda de la capital jujeña, donde contrajo Covid-19 y luego falleció.
Los fiscales además mostraron al Tribunal la conversación que Pérez mantuvo con Cammuso, donde le pedía trabajar desde su casa, por temor a contagiarse y dejar desamparado a su pequeño hijo, situación que lamentablemente terminó pasando con la empleada.
Tras conocerse la parte dispositiva del fallo, los fiscales adelantaron que una vez que conozcan los fundamentos del fallo, van a apelar y rever la nulidad parcial interpuesta por los jueces, por el delito de "homicidio con dolo eventual", en contra de Natalia Cammuso.
"Yo no soy Ely"
Uno de los momentos más tensos se vivieron en la jornada de ayer, cuando la hermana de la víctima fatal, María Pérez junto a su esposo José Espinosa ingresaron al recinto para escuchar la parte dispositiva del fallo.
Cuando el Tribunal en lo Criminal Nº 2 cedió la última palabra a los imputados, antes de pasar a deliberar, la empresaria Natalia Cammuso protagonizó un tenso intercambio de palabras con la mujer.
Pérez dialogaba con uno de los imputados y Natalia Cammuso le levantó la voz, pidiéndole que se callara, mientras que Pérez le respondió que no es su empleada y que cuide sus modales, "yo no soy Eli", le dijo antes que intervinieran los efectivos policiales, mientras continuaban con los gritos.
Bronca y desilusión
María Pérez, hermana de Elisabeth y José Espinosa, cuñado, dialogaron con nuestro diario tras conocerse la parte dispositiva del fallo.
"Me dejó una sensación de vacío, de bronca y desilusión, como el día que me enteré que mi hermana había fallecido. Sigo creyendo que ellos (por los imputados) tienen responsabilidad de la muerte de Elisabeth, si ellos la dejaban a mi hermana trabajar en la casa, hoy ella estaría con nosotros, pero al exponerla a un trabajo en pésimas condiciones de bioseguridad y sumado a las complejidades que padecía, pasó lo que pasó", dijo Pérez.
"Cuando la internaron a mi hermana, el médico nos dijo que llevaba varios días con Covid. No le permitían faltar y sí, fue amenazada con ser despedida. Ella era el único sostén de su hijo y por eso tenía miedo de perder su trabajo", dijo Pérez.
"No he notado ningún gesto de arrepentimiento por parte de estas personas, al contrario, las actitudes en el juicio, de mirarnos sobre los hombros de pie a cabeza, solo los dejó expuestos de cómo tratan a sus empleados y cómo trataron a mi hermana durante el tiempo que les imploraba trabajar desde casa. Creo que la Justicia nos decepcionó, porque si bien no esperábamos que le den nueve años de prisión, no esperábamos que todos fueran absueltos. Los jueces tienen que saber que la muerte de mi hermana se pudo haber evitado, que mi sobrino hoy tendría a su mamá a su lado, que tanta falta le hace", dijo la mujer, hermana de la víctima fatal.
"Cuidate Forro"
El fiscal Alejandro Gurrieri en diálogo con nuestro diario manifestó que se vivió un clima hostil por parte de los imputados y sus familiares, que presenciaron todas las audiencias.
"Sufrimos una falta de respeto absoluta hacia el Ministerio Público de la Acusación, con actitudes pedantes de una imputada en particular. Esta persona (Natalia Cammuso) le refirió al fiscal Diego Cussel de forma textual "ciudate forro" y su padre (Eduardo Cammuso) le dijo que se cuide porque todavía es un chico joven", dijo el fiscal Gurrieri.
"Ahora esto va a depender de la interpretación del fiscal, quien estaba analizando si presentaba una demanda penal en contra de estas personas", aclaró el fiscal de cámara.