La violencia se apoderó de dos mujeres que agredieron a efectivos policiales que procedían contra dos hombres que estaban peleando, en cercanía de la entrada a un local nocturno de la avenida Mejías, en el barrio Malvinas Argentinas de la capital jujeña.
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La violencia se apoderó de dos mujeres que agredieron a efectivos policiales que procedían contra dos hombres que estaban peleando, en cercanía de la entrada a un local nocturno de la avenida Mejías, en el barrio Malvinas Argentinas de la capital jujeña.
Según fuentes consultadas por El Tribuno de Jujuy, el hecho se registró alrededor de las 4, cuando una comisión de efectivos arribó al predio de un conocido local bailable porque había dos hombres agrediéndose físicamente en la vereda.
Por esa razón los uniformados procedieron a disuadir a los sujetos, aunque el resultado no fue el esperado, porque intervinieron dos mujeres que no lo permitieron.
En esas circunstancias, una mujer que aseguró ser pareja de uno de los protagonistas, comenzó a golpear al personal policial y a vociferar insultos, además de intentar quitarle la escopeta a uno de los agentes, quien logró evitarlo, ante la falta de más efectivos mujeres necesarias para intervenir.
La única uniformada en la comisión procedió para reducir a la atacante, aunque se sumaron otras mujeres para impedirlo, llegando una de ellas a propinarle un golpe en la boca.
A esa altura la situación se tornó una gresca generalizada entre hombres, mujeres y uniformados, cuando también apareció en la escena otra mujer que arrojó piedras hacia los efectivos y al móvil policial, además con la intención de frenar el procedimiento mordió en la mano y rasguñó en la cara a un agente.
Tras lograr calmar la situación, minutos después fueron detenidos los dos hombres que habían comenzado el altercado y una de las mujeres, todos trasladados a la Seccional 32° del barrio Malvinas Argentinas.
Más tarde llegó por sus propios medios a la misma sede policial la segunda mujer involucrada en el altercado, en aparente estado de ebriedad, quien fue identificada por personal policial como una de las agresoras y comenzó a vociferar insultos, razón por la que también fue aprehendida.
De manera inmediata desde la seccional se consultó con el ayudante fiscal de turno, quien dispuso que se tomen las denuncias de los agentes agredidos, se soliciten los antecedentes de los protagonistas y que se examine médicamente a todos los involucrados, incluido el personal policial.
Más tarde los hombres y una mujer, miembros de Infantería, que intervinieron en el hecho realizaron la denuncia correspondiente por las agresiones recibidas.
