Dos nuevos hechos que tuvieron como protagonistas a "motochorros" ocurrieron en el barrio Cuyaya de la capital provincial y en la ciudad de Perico, con el saldo de la sustracción de dos teléfonos celulares y dinero.
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Dos nuevos hechos que tuvieron como protagonistas a "motochorros" ocurrieron en el barrio Cuyaya de la capital provincial y en la ciudad de Perico, con el saldo de la sustracción de dos teléfonos celulares y dinero.
El primero de los casos, según fuentes consultadas por El Tribuno de Jujuy, tuvo lugar días atrás en horas de la noche, en momentos que una niña de 12 años caminaba por la calle San Carlos de Bariloche del mencionado sector barrial capitalino.
En esas circunstancias, la víctima se encontraba en la esquina de la calle Viedma, cuando la interceptó una motocicleta con dos hombres a bordo.
Fue entonces que el acompañante descendió del motovehículo y le sustrajo un teléfono celular que tenía en uno de los bolsillos de su pantalón, para después fugarse junto a un cómplice.
Luego de sufrir el ilícito la damnificada se dirigió a la casa de su hermana, a pocas cuadras del escenario del hecho, a quien le contó lo ocurrido.
Tras esto ambas concurrieron a la Seccional 4° de Cuyaya en donde radicaron la denuncia correspondiente, con el aporte de las características de los sospechosos.
Mientras que el segundo caso tuvo lugar en la ciudad de Perico, cuando por la noche una joven caminaba rumbo a su casa por la calle República del Líbano, en cercanías de la feria minorista.
Alrededor de las 22 en el momento que la denunciante llegaba a la intersección con la calle Coronel Arias, fue sorprendida por un sujeto que bajó de una moto de 110 cc de cilindrada.
El sospechoso interceptó a la víctima y le arrebató una mochila, para luego correr hacia donde lo esperaba el cómplice en el rodado y fugarse con rumbo desconocido.
Luego de esta acción la joven fue a la Brigada de Investigaciones de la Unidad Regional 6, en donde narró lo sucedido, además de especificar que en la mochila sustraída tenía un teléfono celular y la suma de 20 mil pesos, que minutos antes le había otorgado su padre.