A menos de una semana del inicio del juicio en contra de los hermanos Rodrigo, Mauricio y Joaquín Vargas que se encuentran en prisión por el asesinato de Ramón Bernardo Armella, el hermano de la víctima Julio Cesar Armella denuncia amenazas.
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A menos de una semana del inicio del juicio en contra de los hermanos Rodrigo, Mauricio y Joaquín Vargas que se encuentran en prisión por el asesinato de Ramón Bernardo Armella, el hermano de la víctima Julio Cesar Armella denuncia amenazas.
Los motivos del crimen del joven se podrán saber a partir del 13 de noviembre cuando se inicie el juicio en contra de los hermanos Vargas.
Armella afirma que desde que la Justicia le sacó la custodia que tenía en la puerta de su casa su vida y la de su familia "es un infierno".
Julio Cesar Armella en diálogo con El Tribuno de Jujuy remarca que "no solo temo por mi vida sino por la de mis hijas y mi esposa, días pasado nos corretearon a pedradas y amenazas de muerte un grupo de personas amiga de la familia de los Vargas".
Julio Cesar Armella recuerda que por el brutal crimen de su hermano en libertad se encuentran otras cuatro personas que son Ivana Vargas, hermana de los imputados Sandra Valdez junto a Inés González y su esposo Eduardo Saavedra, todos ellos participaron la madrugada del 25 de febrero de 2018 del asesinato de Ramón Bernabe Armella de 33 años y padre de cinco hijos, entre ellos uno que en aquel momento solo contaba con seis meses de edad.
En un momento de la charla y con el tono de voz entrecortada recuerda que sus cinco sobrinos están a merced de la solidaridad de la familia ya que como consecuencia de este triste hecho quedaron sin padre y sin la madre, que se abandonó totalmente y que se encuentra en situación de calle por lo cual no se puede hacer cargo de sus hijos de 14, 11, 10, 7 y 2 años.
Pedido de justicia
"Queremos justicia", "exigimos justicia", repite reiteradamente Julio Cesar Armella, "no fue asesinado por una sola persona, en el lugar había más de díez que además de haberlo apuñalado le arrojaron unos bloques en la cabeza".
El resultado de la autopsia dio como resultado que Ramón Armella falleció como consecuencia de las heridas recibidas en el corazón, el hígado y el pulmón.
"Me hermano quedó tendido en la calle a solo unos treinta metros de mi vivienda" expresa Armella, "porque la casa de los Vargas está a unos cien metros de la misma".
Finalmente, indica que lamentablemente no cuentan con abogado defensor porque la doctora que le asigno el Centro de Asistencia a la Víctimas encuentra de vacaciones y el no sabe si se designó alguien en su reemplazo.