Con errores y aciertos, con más corazón que fútbol y sobre todo, sabiéndose fuerte en la adversidad, Gimnasia prolongó su invicto de local. Ayer venció sin sobrarle nada a Santamarina de Tandil y de esta manera, el estadio "23 de Agosto" continúa sin conocer la derrota desde que se reanudó la B Nacional en marzo.
inicia sesión o regístrate.
Con errores y aciertos, con más corazón que fútbol y sobre todo, sabiéndose fuerte en la adversidad, Gimnasia prolongó su invicto de local. Ayer venció sin sobrarle nada a Santamarina de Tandil y de esta manera, el estadio "23 de Agosto" continúa sin conocer la derrota desde que se reanudó la B Nacional en marzo.
El único gol de la tarde fue obra del goleador "albiceleste", Luis Vila, pero la gran figura de la cancha fue Maximiliano Cavallotti. El arquero ahogó tres chances netas de gol de la visita, siendo determinante para el trámite.
En realidad, se pensó que el partido iba a ser diferente, ya que a los 5 minutos, Sufi ejecutó de manera perfecto un córner al vértice del área chica, apareciendo Vila para cabecear muy solo. Nada pudo hacer Casas.
El conjunto de Héctor Arzubialde, exdefensor y DT de los "albicelestes" quien fue ovacionado por los plateístas, sintió el cachetazo. Salió a buscar la igualdad, pero no tuvo ideas. Barrionuevo y Callejo, otros exGimnasia, nunca supieron asociarse con los volantes y entonces las pelotas recuperadas no tenían profundidad.
El local, vía contragolpe, pudo liquidar la historia con un zapatazo de Vila. Casas evitó el gol y Sufi, sin marcas, definió horrible en el rebote.
Sobre el cierre, Callejo aprovechó una indecisión colectiva del fondo, pero Cavallotti se recuperó y ahogó el grito del delantero, en el primer "mano a mano" que ganó.
Apenas arrancó el complemento, Barrionuevo -en otra falla del fondo- se encontró con el balón y reventó el palo. Después se produjo la jugada más polémica de la tarde cuando el asistente Farfor invalidó un tanto que pareció legítimo (Ferreyra en contra) por supuesto off side. Pero el tema es que Olmedo había cabeceado hacia atrás.
Los minutos siguieron pasando y Sosa fue quien exigió al "Uno" local.
El "lobo" empezó a ser superado en todos los sectores y regaló el terreno. Se metió muy atrás, y aunque entre Vila y Maldonado pudieron aumentar, Sosa tuvo la oportunidad más clara en tiempo de descuento con un tiro a quemarropa, que Cavallotti se encargó de desviar.
El cuadro dirigido por Fernando Gamboa mantuvo su invicto en casa y sigue mostrando que el "23" recuperó su mística, inclusive cuando Santamarina mereció al menos llevarse un puntito.
Ahora el desafío será volver a cosechar de a tres en condición de visitante.
Minuto de silencio y luto
Antes del arranque del encuentro hubo un minuto de silencio en el estadio “23 de Agosto”. El motivo fue el fallecimiento del padre de Enzo Serrano, jugador del plantel profesional del “lobo”, que fue recordado por todos los presentes con el respetuoso minuto de silencio. Además los jugadores de Gimnasia portaron la cinta negra en señal de luto, acompañados por la terna arbitral que también lució el brazalete en señal de respeto.
Por otro lado, fue recordado con aplausos por su paso como jugador y técnico, Héctor Arzubialde, actual DT de Santamarina de Tandil. Desde la platea bajaron los aplausos para el entrenador cordobés, quien además recibió el saludo de algunos integrantes del actual plantel “albiceleste”, como ser Maximiliano Cavallotti, Leonardo Ferreyra, Rodrigo Morales, Ignacio Sanabria y Carlos De Giorgi, quienes jugaron bajo sus órdenes.
Gamboa: “Mucha entrega”
En la conferencia de prensa brindada pos victoria ante Santamarina de Tandil, el entrenador de Gimnasia reconoció que sus dirigidos no jugaron un gran encuentro, pero destacó sobre todo los tres puntos que nuevamente se quedaron en casa. “Hay realidades a las cuales uno no les puede escapar. No todos los partidos se pueden manejar como a uno le gusta y también uno debe tener la virtud o la humildad de saber que te enfrentás a rivales que por momentos pueden ser superiores a vos. En este caso nos enfrentamos a un equipo que juega bien al fútbol, que puso mucha gente en mitad de cancha y que presionó bien. Creo que se vio que nos costó muchísimo poder salir con claridad y como nosotros queremos, que no es tirando la pelota arriba. Y hoy por momentos lo hicimos y mucho. Pero tampoco podemos intentar salir y perderla como nos pasó”, expresó el DT, agregando que “igualmente creo que el primer tiempo fue bueno. Obviamente que hubiera cambiado el partido, hasta en el ánimo, la jugada del mano a mano de Vila con el posterior remate de Sufi. Después en el segundo tiempo ellos presionaron mucho más y no solamente tuvieron la pelota, sino que tuvieron buena circulación de la misma. Eso nos llevó a tener que defender un poco más atrás de lo que a uno le gusta, a diferencia de otros partidos. Así que creo que en definitiva hay que ser conscientes y saber que uno compite para ganar. Si me preguntan, yo quiero obviamente ganar jugando bien siempre, pero prefiero meterme a mi vestuario con 45’ mal, pero ganando. Eso es lo que destaco y es fruto de la entrega de los jugadores dentro del campo de juego. Y como se los dije a los jugadores estamos cerca todos en la tabla de puntos y no me hace gracia verme en el puesto 17 y sí vernos ahora más arriba en el puesto 11, que se acomoda más a lo que nosotros queremos para Gimnasia. Para eso hay que ganar y afortunadamente lo pudimos hacer”. Siguiendo con el análisis, el DT “lobo” explicó que “el partido por parte de ellos, fue una apuesta a recuperar la pelota en mitad de cancha y circular con criterio. Y nosotros no pudimos hacer lo que sí hicimos en partidos anteriores. Pero ahora es importante tener una semana por delante para preparar el partido contra Flandria y siempre es bienvenido poder hacerlo luego de una victoria y pudiendo estar de mitad de tabla para arriba y no para abajo, como fue antes de afrontar este partido ante un buen rival como terminó siendo Santamarina”, analizó el entrenador “albiceleste”, conforme con la victoria conseguida pese a no tener un gran juego durante la tarde de ayer en el “23 de Agosto”. (Manuel Caballero).