Gimnasia, cada vez que juega en condición de visitante, sufre. Y aunque venía de un importante empate ante Central Córdoba en Santiago, ayer nuevamente dio un paso en falso, cayendo uno a cero en manos de Independiente Rivadavia en Mendoza.
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Gimnasia, cada vez que juega en condición de visitante, sufre. Y aunque venía de un importante empate ante Central Córdoba en Santiago, ayer nuevamente dio un paso en falso, cayendo uno a cero en manos de Independiente Rivadavia en Mendoza.
El partido se jugó en el estadio "Bautista Gargantini", bajo el control de Mariano González, y correspondió a la 35§ fecha de la B Nacional.
En el primer tiempo, ambos se fueron con todo a buscar el arco rival. Vila de cabeza avisó primero. Mientras que luego Ojeda, sobre la línea, evitó el casi festejo de Rodríguez.
El trámite era entretenido. De ida y vuelta. Cavallotti voló abajo e impidió el grito de Cardozo. Luego Sánchez no pudo conectar, tras un córner y posterior "peinada" del Ojeda. El central estuvo a punto de inflar la red.
Los minutos finales de la etapa pasaron sin pena ni gloria. Eso sí, en medio de la lucha, Frezzotti recibió la quinta amonestación y no podrá jugar el próximo fin de semana con Santamarina.
Apenas arrancó el complemento, Cardozo reventó el travesaño y en el rebote nadie marcó a Tarragona, quien anotó con un fuerte derechazo. Nada pudo hacer Cavallotti.
A partir de allí, la "lepra", que lucha no por descender, cuidó el triunfo con uñas y dientes. Retrasó las líneas, dejando la pelota para la visita.
El problema fue que no supo qué hacer con ella. Los volantes estuvieron muy alejados de los delanteros, situación que llevó a abusar de los pelotazos.
El técnico Fernando Gamboa mandó a la cancha al juvenil Virreyra por el intrascendente García, pero tampoco fue solución.
Gimnasia terminó jugando realmente mal, perdido en su propia inoperancia. Es verdad que arrinconó a Independiente Rivadavia, pero no generó ocasiones netas de gol.
Y en el cierre, Cavallotti -cuándo no- se agrandó frente al ingresado Villarreal, que no pudo con su disparo bajo.
Jugar en condición de visitante para los "lobos" parece una pesadilla, donde los sinsabores son una constante.