Alumnos de quinto grado de la Escuela Nº 223 "Arzobispo José M. Mendizabal" del barrio 17 de Agosto en la zona sur capitalina, cantaron el Himno Nacional Argentino utilizando el lenguaje de señas, con el fin de difundir y concientizar sobre la inclusión de las personas con capacidades diferentes.
En el marco de los festejos por el Día de la Bandera, 46 alumnos de los dos quintos grados del turno tarde de la Escuela Mendizábal, entonaron las estrofas del Himno Nacional, de una manera particular, con lenguaje de señas. Según explicó la docente a cargo, Mariel Lemir, la iniciativa forma parte de un proyecto que busca desarrollar en los niños el respeto por el prójimo, haciendo especial hincapié en la igualdad de la personas.
"Esto surge como un proyecto que presentamos de modo que los chicos logren desarrollar un sentimiento de igualdad hacia todas las personas, que logren ponerse en el lugar de las otras personas que tienen alguna dificultad o diferencia", expresó la docente, a la vez que mencionó que en la oportunidad 46 alumnos de los quinto grados de la escuela, fueron los principales actores.
"Esto es un proyecto ambicioso, que habla de ponerse en el lugar del otro, basándonos siempre en la inclusión y la integración educativa", completó la bibliotecaria.
En el marco de los festejos por el Día de la Bandera, 46 alumnos de los dos quintos grados del turno tarde de la Escuela Mendizábal, entonaron las estrofas del Himno Nacional, de una manera particular, con lenguaje de señas. Según explicó la docente a cargo, Mariel Lemir, la iniciativa forma parte de un proyecto que busca desarrollar en los niños el respeto por el prójimo, haciendo especial hincapié en la igualdad de la personas.
"Esto surge como un proyecto que presentamos de modo que los chicos logren desarrollar un sentimiento de igualdad hacia todas las personas, que logren ponerse en el lugar de las otras personas que tienen alguna dificultad o diferencia", expresó la docente, a la vez que mencionó que en la oportunidad 46 alumnos de los quinto grados de la escuela, fueron los principales actores.
Por su parte, Silvia de la Restra, bibliotecaria del establecimiento, sostuvo que todos los directivos y docentes apoyaron el proyecto "porque consideramos que la integración es lo más importante y los niños son los más maleables para enseñarles que todos somos iguales".
"Esto es un proyecto ambicioso, que habla de ponerse en el lugar del otro, basándonos siempre en la inclusión y la integración educativa", completó la bibliotecaria.
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