La sala de industria es uno de los sectores más atractivos del establecimiento. Allí los estudiantes aprenden habilidades que les asegurarán su inserción en el mercado laboral.
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La sala de industria es uno de los sectores más atractivos del establecimiento. Allí los estudiantes aprenden habilidades que les asegurarán su inserción en el mercado laboral.
En ese ámbito, los alumnos de cuarto año son impuestos en materia de industrialización de productos agropecuarios. La docente Alicia Apaza tiene a su cargo la cátedra.
A esta altura del año, ya trabajaron todo lo vinculado con la panificación en quinua. Realizaron desde alfajores hasta pizzas, pasando por postres, bombones y hasta bebidas con el milenario cereal. A la materia prima, que obtienen de productores de Ocumazo y Rodero, la industrializan, para ello disponen de un molino donde la muelen y elaboran harina para panificación.
Al mismo tiempo se desarrollan ensayos de siete variedades de quinua con los docentes responsables de cultivos industriales.
También producen chacinados con carne de vaca, cerdo y cabra, hamburguesas, salames, salamines, butifarra, queso de cerdo y hasta jamón crudo.
En cuanto a bebidas y como en cuarto año estudian las hierbas medicinales, elaboran algunos productos como fernet y aperitivo americano, destacó la docente.
Paralelamente y con el apoyo del docente de Química están abocados a la producción de queso azul, disponiendo "de la estufa y lo necesario para cultivar los hongos" que caracterizan al producto.
Además de trabajar con lácteos, elaboran conservas, dulces de tomate, zanahoria, membrillo, pera y durazno.
Apaza refirió que este año hubo mucha producción de cuaresmillo, por lo que pequeños productores les facilitaron los frutos que los estudiantes transformaron en dulces, repartiéndose las ganancias a medias.
Cuentan con maquinarias de primera calidad que obtuvieron tras presentar proyectos ante el Instituto Nacional de Educación Tecnológica (Inet).
Comercializan los productos en ferias y lo recaudado se destina a la compra de insumos.
Alicia Apaza refirió que en octubre los alumnos de quinto año dedican una jornada completa al dictado de cursos a cerca de sesenta productores de la zona, en el marco de un trabajo conjunto con el Inta y el área de Desarrollo Rural del municipio.
La iniciativa se inscribe en el proyecto concebido por los estudiantes para el concurso de Escuelas solidarias, consistente en la capacitación de referentes de la comunidad.
El año pasado, por esta realización, obtuvieron una mención del Premio Presidencial.
También tienen prevista una capacitación sobre bebidas. "Van a hacer aperitivos, van a trabajar con el fernet y cerveza", adelantó.
A fines de noviembre o principios de diciembre se desarrollará la Expo Técnica de la que participarán todos los talleres. Sus alumnos ofrecerán dos degustaciones, mencionando que los chicos de cuarto año presentarán arrollados de pollo deshuesado, chorizos y hamburguesas de pollo.
Al concluir, Apaza puso de relieve que ella no trabaja sola, que todos los docentes hacen su aporte.
Por ejemplo, la profesora de Lengua se ocupa de las etiquetas, el de Informática las imprime, el de Química controla cantidades, conservantes y pesaje de ingredientes.
En definitiva, se trata de una cadena de producción que funciona "perfectamente aceitada".
Egresarán como técnicos en producción agropecuaria
La promoción 2017 de la Agrotécnica humahuaqueña egresará con el título de técnico en producción agropecuaria, con validez nacional. Esto es en virtud de un nuevo plan instrumentado en la casa de estudios fundada en 1984.
Como la orientación es agropecuaria, los alumnos disponen de extensiones de tierra donde realizan ensayos experimentales y prácticas. Cada uno de ellos cuenta con botas de goma que utilizan para las tareas de riego. Por estos días pueden verse plantaciones de ajo, almácigos de cebolla y acelga que serán trasplantados una vez que mejoren las condiciones climáticas, ya que la amplitud térmica es muy pronunciada. También se destaca la siembra directa de habas. El suelo ya está en condiciones para hacer la implantación, tras las labores de arado, cincelado y abonado. Una gran parte de la producción de zanahorias, zapallos, zapallitos, papas y maíz se destina al comedor escolar, mientras que el exceso se pone a la venta para cubrir los gastos de abono, semillas, gasoil y repuestos para el tractor.