Maximiliano Abiuso, un herrero de 32 años que vive en la localidad bonaerense de Caseros, le hizo a su hijo Luciano una prótesis con una impresora 3D, ya que el pequeño nació con un tipo de malformación congénita denominada "agenesia" por la cual, en vez de una mano, se le desarrolló el principio de la muñeca con unos pequeños dedos.
"Decidí hacerlo porque tuve una mala experiencia con la ortopedia", contó el hombre, luego de compartir su tranajo en la plataforma argentina Taringa. "Mi publicación recibió más 60.000 visitas, y también me mandaron un montón de mensajes privados personas que se emocionaron y me felicitaron, y otras que querían que los ayude a armar la impresora", expresó.
"La prótesis que nos dieron en la ortopedia era un desastre, sin movilidad y muy incómoda, por eso comenzamos a googlear y encontramos a una nenita inglesa de dos meses que tenía una muy chiquitita", declaró. "Busqué quién me podía imprimir la prótesis en 3D, pero me salía carísimo el servicio", narró.
"Entonces empecé a investigar cómo armarla", explicó.
"La primera prótesis la hice en abril y a medida que Luciano vaya creciendo le tengo que ir haciendo nuevas", expresó Abiuso.
"Soñé con una mano hidráulica"
Natalia Weisbeck, mujer de Maximiliano Abiuso y madre del bebé, manifestó que tuvo "pérdidas al principio del embarazo", pero que "no le informaron en ninguna de las ecografías" el tipo de malformación con el que nació Luciano el 9 de octubre de 2014.
"El día que nació me vine a dormir solo porque mi mujer todavía estaba internada, y soñé que le hacía al bebé una mano hidráulica para que pueda forjar los yunques, como lo hago yo en mi trabajo de herrero", contó el herrero de 32 años que fabricó la mano en la impresora 3D.
Ambos padres manifestaron su emoción en el momento del nacimiento del bebé, y también su "nerviosismo" cuando tuvieron que hacerle estudios en el cerebro para ver si había algún problema allí o en otro órgano, pero "respiraron aliviados" cuando les dijeron que "finalmente todo era normal".
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Maximiliano Abiuso, un herrero de 32 años que vive en la localidad bonaerense de Caseros, le hizo a su hijo Luciano una prótesis con una impresora 3D, ya que el pequeño nació con un tipo de malformación congénita denominada "agenesia" por la cual, en vez de una mano, se le desarrolló el principio de la muñeca con unos pequeños dedos.
"Decidí hacerlo porque tuve una mala experiencia con la ortopedia", contó el hombre, luego de compartir su tranajo en la plataforma argentina Taringa. "Mi publicación recibió más 60.000 visitas, y también me mandaron un montón de mensajes privados personas que se emocionaron y me felicitaron, y otras que querían que los ayude a armar la impresora", expresó.
"La prótesis que nos dieron en la ortopedia era un desastre, sin movilidad y muy incómoda, por eso comenzamos a googlear y encontramos a una nenita inglesa de dos meses que tenía una muy chiquitita", declaró. "Busqué quién me podía imprimir la prótesis en 3D, pero me salía carísimo el servicio", narró.
"Entonces empecé a investigar cómo armarla", explicó.
"La primera prótesis la hice en abril y a medida que Luciano vaya creciendo le tengo que ir haciendo nuevas", expresó Abiuso.
"Soñé con una mano hidráulica"
Natalia Weisbeck, mujer de Maximiliano Abiuso y madre del bebé, manifestó que tuvo "pérdidas al principio del embarazo", pero que "no le informaron en ninguna de las ecografías" el tipo de malformación con el que nació Luciano el 9 de octubre de 2014.
"El día que nació me vine a dormir solo porque mi mujer todavía estaba internada, y soñé que le hacía al bebé una mano hidráulica para que pueda forjar los yunques, como lo hago yo en mi trabajo de herrero", contó el herrero de 32 años que fabricó la mano en la impresora 3D.
Ambos padres manifestaron su emoción en el momento del nacimiento del bebé, y también su "nerviosismo" cuando tuvieron que hacerle estudios en el cerebro para ver si había algún problema allí o en otro órgano, pero "respiraron aliviados" cuando les dijeron que "finalmente todo era normal".
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