Sobre el final de un discurso que se extendió por una hora, la mandataria advirtió que existen "dispositivos antidemocráticos, activados en forma precisa, contra personas precisas", que son impulsados por un "trípode integrado por la denuncia mediática, los opositores de centroderecha y el poder judicial".
En ese sentido, arremetió contra la justicia y recalcó: "No le tengo miedo a ningún juez pistolero, mafioso o extorsionador". Además, sostuvo que muchos de esos magistrados son los que "guardan causas de lavado de dinero o de lesa humanidad, que duermen el sueño de los justos".
Tras 13 días sin actos oficiales y totalmente recuperada del cuadro de laringitis, Cristina Kirchner defendió a su jefe de Gabinete y cuestionó las denuncias de la oposición en época de campaña, que -según dijo- tienen eco "en sectores del poder judicial".
"Esta semana hemos batido récord en materia de originalidad (con las denuncias en campaña), desde lo que parece ser la casa de una diputada, casi un aguantadero", señaló la mandataria nacional, al referirse a la entrevista que brindó el procesado por narcotráfico José Luis Salermo en la casa de Carrió. La jefa de Estado afirmó que ella "jamás metería a alguien que está procesado por narcotráfico" en su casa. "Se filmó una denuncia con un preso que está condenado a cadena perpetua involucrando a funcionarios de nuestro Gobierno, con una clara intención de perjudicar", resaltó.
En alusión a las denuncias, la mandataria les pidió a sus dirigentes que "no las vivan como humillación, sino como un reconocimiento".
Sobre el final de un discurso que se extendió por una hora, la mandataria advirtió que existen "dispositivos antidemocráticos, activados en forma precisa, contra personas precisas", que son impulsados por un "trípode integrado por la denuncia mediática, los opositores de centroderecha y el poder judicial".
En ese sentido, arremetió contra la justicia y recalcó: "No le tengo miedo a ningún juez pistolero, mafioso o extorsionador". Además, sostuvo que muchos de esos magistrados son los que "guardan causas de lavado de dinero o de lesa humanidad, que duermen el sueño de los justos".
Tras 13 días sin actos oficiales y totalmente recuperada del cuadro de laringitis, Cristina Kirchner defendió a su jefe de Gabinete y cuestionó las denuncias de la oposición en época de campaña, que -según dijo- tienen eco "en sectores del poder judicial".
"Esta semana hemos batido récord en materia de originalidad (con las denuncias en campaña), desde lo que parece ser la casa de una diputada, casi un aguantadero", señaló la mandataria nacional, al referirse a la entrevista que brindó el procesado por narcotráfico José Luis Salermo en la casa de Carrió. La jefa de Estado afirmó que ella "jamás metería a alguien que está procesado por narcotráfico" en su casa. "Se filmó una denuncia con un preso que está condenado a cadena perpetua involucrando a funcionarios de nuestro Gobierno, con una clara intención de perjudicar", resaltó.
En alusión a las denuncias, la mandataria les pidió a sus dirigentes que "no las vivan como humillación, sino como un reconocimiento".