"No podemos desaprovechar la oportunidad de construir unidos una nueva Argentina", resaltó el gobernador de
Córdoba, al tiempo que reclamó "un nuevo modo de hacer política". En tanto, el líder del Frente Renovador afirmó que ambos dirigentes pretenden terminar "con la idea de la división de facciones".
"La Argentina que viene tiene que ser la de la unidad", definió Massa junto a De la Sota y agregó: "Tenemos la convicción de que tenemos una deuda con la sociedad y tenemos que recorrer el camino más difícil".
El mandatario provincial aseguró que junto al diputado nacional no pueden "desaprovechar la oportunidad de construir unidos una nueva Argentina", además de conformar "un nuevo modo de hacer política".
Asimismo, el cordobés subrayó que para ello "es necesario romper el bloque" que les quieren "imponer diciendo que no hay tercera posición". "Nosotros somos la alternativa de la paz y el progreso", precisó.
El primero en exponer sus ideas frente a los más de mil dirigentes fue De la Sota, quien manifestó que decidieron conformar esta alianza con la idea de que "la política sirva para cambiar la vida la gente y no a los políticos que se corrompen".
"Queremos hacer una política que cambie la soberbia por humildad, los gritos por el diálogo, los eslogan sin sentido por propuestas sólidas para resolver los viejos problemas del país", aseguró el cordobés y agregó que para impedir esta posibilidad quieren hacerles "creer que hay una alternativa que no es la de un futuro y progreso real".
En este sentido, apuntó contra "el bipartidismo trucho" encabezado por "la continuidad mediocre con la cara de (Daniel) Scioli y la conducción de La Cámpora" y "una oposición disfrazada de moderna que es la rendición al ajuste, la insensibilidad y de las posiciones vengativas" que pretenden retrotraerse "al peor de los pasados económicos".
Por su parte, Massa llamó a "bajarle definitivamente la persiana a las divisiones y la fractura", luego de sufrir en los últimos días la fuga de dirigentes del Frente Renovador hacia el Frente para la Victoria y el PRO.
"La Argentina que viene tiene que ser la de la unidad y la convicción de que tenemos obligaciones y deudas con nuestra sociedad", resaltó el dirigente tigrense y agregó: "En algunas editoriales plantean que construir esta ancha avenida del medio parece un camino imposible. Pero hay millones de argentinos que quieren un cambio y que se termine la corrupción".
"Sé que hay dirigentes que tienen un precio, pero también hay muchos que tienen el valor de querer cambiar de verdad la Argentina en la que vivimos", disparó Massa, en alusión a los jefes comunales que abandonaron su espacio esta semana.
"No podemos desaprovechar la oportunidad de construir unidos una nueva Argentina", resaltó el gobernador de
Córdoba, al tiempo que reclamó "un nuevo modo de hacer política". En tanto, el líder del Frente Renovador afirmó que ambos dirigentes pretenden terminar "con la idea de la división de facciones".
"La Argentina que viene tiene que ser la de la unidad", definió Massa junto a De la Sota y agregó: "Tenemos la convicción de que tenemos una deuda con la sociedad y tenemos que recorrer el camino más difícil".
El mandatario provincial aseguró que junto al diputado nacional no pueden "desaprovechar la oportunidad de construir unidos una nueva Argentina", además de conformar "un nuevo modo de hacer política".
Asimismo, el cordobés subrayó que para ello "es necesario romper el bloque" que les quieren "imponer diciendo que no hay tercera posición". "Nosotros somos la alternativa de la paz y el progreso", precisó.
El primero en exponer sus ideas frente a los más de mil dirigentes fue De la Sota, quien manifestó que decidieron conformar esta alianza con la idea de que "la política sirva para cambiar la vida la gente y no a los políticos que se corrompen".
"Queremos hacer una política que cambie la soberbia por humildad, los gritos por el diálogo, los eslogan sin sentido por propuestas sólidas para resolver los viejos problemas del país", aseguró el cordobés y agregó que para impedir esta posibilidad quieren hacerles "creer que hay una alternativa que no es la de un futuro y progreso real".
En este sentido, apuntó contra "el bipartidismo trucho" encabezado por "la continuidad mediocre con la cara de (Daniel) Scioli y la conducción de La Cámpora" y "una oposición disfrazada de moderna que es la rendición al ajuste, la insensibilidad y de las posiciones vengativas" que pretenden retrotraerse "al peor de los pasados económicos".
Por su parte, Massa llamó a "bajarle definitivamente la persiana a las divisiones y la fractura", luego de sufrir en los últimos días la fuga de dirigentes del Frente Renovador hacia el Frente para la Victoria y el PRO.
"La Argentina que viene tiene que ser la de la unidad y la convicción de que tenemos obligaciones y deudas con nuestra sociedad", resaltó el dirigente tigrense y agregó: "En algunas editoriales plantean que construir esta ancha avenida del medio parece un camino imposible. Pero hay millones de argentinos que quieren un cambio y que se termine la corrupción".
"Sé que hay dirigentes que tienen un precio, pero también hay muchos que tienen el valor de querer cambiar de verdad la Argentina en la que vivimos", disparó Massa, en alusión a los jefes comunales que abandonaron su espacio esta semana.