El
Reino Unido puso en marcha un proyecto para el uso de
automóviles sin conductores en la vía pública que, con la financiación del Gobierno, busca convertir a ese país en exportador de estos vehículos.
El proyecto, de unos 30 millones de dólares y financiado por el gobierno británico, se propone el objetivo de garantizar que el país sea líder mundial en el área. El Reino Unido está a la cabeza de la tecnología automotriz, desde los autos eléctricos producidos en Sunderland hasta los coches de Fórmula 1 creados en el Midlands", dijo el ministro de Negocios, Vince Cable.
Consideró además que "es importante para la creación de empleos, para el crecimiento y la sociedad mantenernos al frente de la innovación, y por eso lanzamos un concurso para investigar y desarrollar los vehículos autónomos", según informó la agencia Ansa.
Uno de esos vehículos fue probado en el barrio londinense de Greenwich, como también en áreas cerradas y peatonales de Milton Keynes, Bristol y Coventry, en Inglaterra.
El coche llamado autónomo, sin conductor o auto-conducido es un automóvil capaz de imitar las capacidades humanas de manejo y control. El Gobierno indicó que no hay barreras legales para probar los vehículos autónomos en calles públicas del país, pero aclaró que deberán modificarse normas viales y de control vehicular para permitir que los autos autónomos puedan transitar libremente por las calles, rutas y avenidas del país.
Nick Reed, del Transport Research Lab, la empresa que está detrás de las pruebas en Greenwich, afirmó que esos vehículos utilizan sensores para evitar el peligro. "La seguridad es primordial en nuestra investigación. El vehículo en el que estamos trabajando detecta objetos en movimiento a su alrededor y en caso de que detecte a peatones que se mueven en su dirección, reduce la velocidad hasta detenerse antes de golpear a la persona", explicó.
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Reino Unido puso en marcha un proyecto para el uso de
automóviles sin conductores en la vía pública que, con la financiación del Gobierno, busca convertir a ese país en exportador de estos vehículos.
El proyecto, de unos 30 millones de dólares y financiado por el gobierno británico, se propone el objetivo de garantizar que el país sea líder mundial en el área. El Reino Unido está a la cabeza de la tecnología automotriz, desde los autos eléctricos producidos en Sunderland hasta los coches de Fórmula 1 creados en el Midlands", dijo el ministro de Negocios, Vince Cable.
Consideró además que "es importante para la creación de empleos, para el crecimiento y la sociedad mantenernos al frente de la innovación, y por eso lanzamos un concurso para investigar y desarrollar los vehículos autónomos", según informó la agencia Ansa.
Uno de esos vehículos fue probado en el barrio londinense de Greenwich, como también en áreas cerradas y peatonales de Milton Keynes, Bristol y Coventry, en Inglaterra.
El coche llamado autónomo, sin conductor o auto-conducido es un automóvil capaz de imitar las capacidades humanas de manejo y control. El Gobierno indicó que no hay barreras legales para probar los vehículos autónomos en calles públicas del país, pero aclaró que deberán modificarse normas viales y de control vehicular para permitir que los autos autónomos puedan transitar libremente por las calles, rutas y avenidas del país.
Nick Reed, del Transport Research Lab, la empresa que está detrás de las pruebas en Greenwich, afirmó que esos vehículos utilizan sensores para evitar el peligro. "La seguridad es primordial en nuestra investigación. El vehículo en el que estamos trabajando detecta objetos en movimiento a su alrededor y en caso de que detecte a peatones que se mueven en su dirección, reduce la velocidad hasta detenerse antes de golpear a la persona", explicó.