El presidente ruso Vladimir Putin, habló ayer por primera vez públicamente sobre la tragedia: "Sin duda alguna hay que hacer todo para recrear una imagen objetiva de lo ocurrido, para que sepamos lo que sucedió y reaccionemos debidamente a ello", dijo Putin en una reunión con el ministro de Transporte, Maxim Sokolov.
La "única causa posible es una acción externa", dijo por su parte Alexandre Smirnov, un ejecutivo de alto nivel de Metrojet, refiriéndose al accidente. "Excluimos todo fallo técnico o error de pilotaje" el "avión estaba en excelente estado técnico", agregó Smirnov en rueda de prensa.
No obstante, la agencia federal rusa encargada del transporte aéreo, Rosaviatsia, matizó estas conclusiones de Metrojet, considerándolas "prematuras". "No hay ninguna razón (por ahora) para sacar conclusiones sobre las causas de la destrucción en vuelo del aparato", declaró su director, Alexandre Neradko, estimando que se necesita "mucho trabajo" de análisis de los restos y de las cajas negras.
La hipótesis de un atentado sigue sobre la mesa después de que el brazo egipcio del grupo yihadista Estado Islámico (EI) reivindicara haber destruido el avión en represalia a los bombardeos rusos en Siria.
El Airbus A321 pasó su revisión técnica anual en Irlanda y según la unidad de investigación no se habían detectado problemas.
La catástrofe, la peor jamás registrada por Rusia, mató a los 217 pasajeros y a los siete miembros de la tripulación del avión que iba de la ciudad turística egipcia de Sharm el-Sheij hacia San Petersburgo.
Ayer por la mañana, un avión con los cuerpos de 140 víctimas aterrizó en San Petersburgo y se esperaba la llegada de un segundo avión con más cuerpos en horas de la noche.
"El procedimiento de indentifación ya comenzó. Es un trabajo largo y laborioso que durará el tiempo que sea necesario", dijo Igor Albine, vicegobernador de San Petersburgo.
Investigadores de todo el mundo están colaborando con Egipto para esclarecer las razones del accidente.
Las cajas negras del aparato fueron encontradas y según un responsable irlandés que participa en la investigación su contenido será analizado en los próximos días.
Según los responsables de la búsqueda, hasta ahora se han recuperado 168 cuerpos de un total de 224 (217 pasajeros y siete miembros de la tripulación, todos rusos excepto tres ucranianos).
Rusia declaró el domingo un día de duelo nacional y miles de personas se congregaron en la Plaza del Palacio de San Petersburgo para realizar un minuto de silencio y lanzar globos y palomas al cielo.
Además, Putin rindió homenaje ayer a la dignidad de la reacción de los habitantes de San Petersburgo.
Tanto Egipto como Rusia descartaron la reivindicación del EI y el equipo internacional de expertos está investigando otras posibles causas.
El presidente ruso Vladimir Putin, habló ayer por primera vez públicamente sobre la tragedia: "Sin duda alguna hay que hacer todo para recrear una imagen objetiva de lo ocurrido, para que sepamos lo que sucedió y reaccionemos debidamente a ello", dijo Putin en una reunión con el ministro de Transporte, Maxim Sokolov.
La "única causa posible es una acción externa", dijo por su parte Alexandre Smirnov, un ejecutivo de alto nivel de Metrojet, refiriéndose al accidente. "Excluimos todo fallo técnico o error de pilotaje" el "avión estaba en excelente estado técnico", agregó Smirnov en rueda de prensa.
No obstante, la agencia federal rusa encargada del transporte aéreo, Rosaviatsia, matizó estas conclusiones de Metrojet, considerándolas "prematuras". "No hay ninguna razón (por ahora) para sacar conclusiones sobre las causas de la destrucción en vuelo del aparato", declaró su director, Alexandre Neradko, estimando que se necesita "mucho trabajo" de análisis de los restos y de las cajas negras.
La hipótesis de un atentado sigue sobre la mesa después de que el brazo egipcio del grupo yihadista Estado Islámico (EI) reivindicara haber destruido el avión en represalia a los bombardeos rusos en Siria.
El Airbus A321 pasó su revisión técnica anual en Irlanda y según la unidad de investigación no se habían detectado problemas.
La catástrofe, la peor jamás registrada por Rusia, mató a los 217 pasajeros y a los siete miembros de la tripulación del avión que iba de la ciudad turística egipcia de Sharm el-Sheij hacia San Petersburgo.
Ayer por la mañana, un avión con los cuerpos de 140 víctimas aterrizó en San Petersburgo y se esperaba la llegada de un segundo avión con más cuerpos en horas de la noche.
"El procedimiento de indentifación ya comenzó. Es un trabajo largo y laborioso que durará el tiempo que sea necesario", dijo Igor Albine, vicegobernador de San Petersburgo.
Investigadores de todo el mundo están colaborando con Egipto para esclarecer las razones del accidente.
Las cajas negras del aparato fueron encontradas y según un responsable irlandés que participa en la investigación su contenido será analizado en los próximos días.
Según los responsables de la búsqueda, hasta ahora se han recuperado 168 cuerpos de un total de 224 (217 pasajeros y siete miembros de la tripulación, todos rusos excepto tres ucranianos).
Rusia declaró el domingo un día de duelo nacional y miles de personas se congregaron en la Plaza del Palacio de San Petersburgo para realizar un minuto de silencio y lanzar globos y palomas al cielo.
Además, Putin rindió homenaje ayer a la dignidad de la reacción de los habitantes de San Petersburgo.
Tanto Egipto como Rusia descartaron la reivindicación del EI y el equipo internacional de expertos está investigando otras posibles causas.