Un zoológico danés provocó polémica ayer al efectuar una disección de un león ante unos niños durante un acto educativo calificado de "espectáculo macabro" por activistas de los derechos animales.
El león, de nueve meses de edad, era uno de los tres ejemplares del zoo de Odense (centro), que tuvo que ser sacrificado en febrero pasado porque no se halló otro hogar para él.
El león, de nueve meses de edad, tuvo que ser sacrificado porque no se halló otro hogar para él y no tenía pareja para aparearse.
Desde su muerte había estado conservado en un frigorífico, y ayer la dirección del zoo organizó esa disección ante un grupo de escuelas, con chicos de incluso cuatro años de edad entre los espectadores.
Las disecciones ante escuelas son algo común en los zoos daneses, ya que son consideradas una actividad útil para complementar el aprendizaje de ciencias naturales.
Entre 300 y 400 niños y adultos asistieron a la peculiar lección, que empezó con el corte de la lengua del león. Algunos niños estaban solamente a pocos centímetros del experto, Rasmus Kolind, por lo que se taparon la nariz mientras el guía despellejaba al animal y el olor a cadáver se esparcía en el auditorio.
"¿No sería raro que oliera a flores o algo parecido?", preguntó Kolind a la audiencia. "Los animales muertos huelen a muerte, no hay mucho más que decir al respecto", añadió.
Un grupo de defensa de los derechos de los animales acusó al zoo de "hacer un espectáculo macabro de una gran tragedia".
El león fue sacrificado porque no tenía una pareja disponible para aparearse.
Una portavoz de la Sociedad Humana Internacional, Wendy Higgins, acusó al zoo de "hacer un espectáculo macabro de una gran tragedia". El problema de fondo, según este grupo defensor de los derechos de los animales, es el exceso de leones "y miles de animales" en los zoológicos del mundo entero.
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Un zoológico danés provocó polémica ayer al efectuar una disección de un león ante unos niños durante un acto educativo calificado de "espectáculo macabro" por activistas de los derechos animales.
El león, de nueve meses de edad, era uno de los tres ejemplares del zoo de Odense (centro), que tuvo que ser sacrificado en febrero pasado porque no se halló otro hogar para él.
El león, de nueve meses de edad, tuvo que ser sacrificado porque no se halló otro hogar para él y no tenía pareja para aparearse.
Desde su muerte había estado conservado en un frigorífico, y ayer la dirección del zoo organizó esa disección ante un grupo de escuelas, con chicos de incluso cuatro años de edad entre los espectadores.
Las disecciones ante escuelas son algo común en los zoos daneses, ya que son consideradas una actividad útil para complementar el aprendizaje de ciencias naturales.
Entre 300 y 400 niños y adultos asistieron a la peculiar lección, que empezó con el corte de la lengua del león. Algunos niños estaban solamente a pocos centímetros del experto, Rasmus Kolind, por lo que se taparon la nariz mientras el guía despellejaba al animal y el olor a cadáver se esparcía en el auditorio.
"¿No sería raro que oliera a flores o algo parecido?", preguntó Kolind a la audiencia. "Los animales muertos huelen a muerte, no hay mucho más que decir al respecto", añadió.
Un grupo de defensa de los derechos de los animales acusó al zoo de "hacer un espectáculo macabro de una gran tragedia".
El león fue sacrificado porque no tenía una pareja disponible para aparearse.
Una portavoz de la Sociedad Humana Internacional, Wendy Higgins, acusó al zoo de "hacer un espectáculo macabro de una gran tragedia". El problema de fondo, según este grupo defensor de los derechos de los animales, es el exceso de leones "y miles de animales" en los zoológicos del mundo entero.
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