Si hay un tiempo que perdura para siempre en el corazón de una persona, es el maravilloso tiempo de estudiante. Tiempo en el que se descubre la amistad, el amor, el compartir, las andanzas. Ese tiempo, como un verdadero tesoro, se guarda en un cofre que nada puede vulnerar, cada vez que se abre, florecen los recuerdos y dicen que recordar es volver a pasar por el corazón y con esa premisa, los alumnos de la promoción del año 1973 de la escuela de Comercio "Dr. José Ingenieros" tomaron la más que importante decisión de reunirse.
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Si hay un tiempo que perdura para siempre en el corazón de una persona, es el maravilloso tiempo de estudiante. Tiempo en el que se descubre la amistad, el amor, el compartir, las andanzas. Ese tiempo, como un verdadero tesoro, se guarda en un cofre que nada puede vulnerar, cada vez que se abre, florecen los recuerdos y dicen que recordar es volver a pasar por el corazón y con esa premisa, los alumnos de la promoción del año 1973 de la escuela de Comercio "Dr. José Ingenieros" tomaron la más que importante decisión de reunirse.
Lo hicieron por primera vez el año pasado, cuando cumplieron las Bodas de Oro de egresados y quedó el compromiso de renovar la llamada "juntada", cada año, invitando también a algunos de sus profesores.
Este año, gracias a la estimable colaboración del padre Jorge García Méndez, la reunión de la promoción '73 se realizó en el antiguo salón de Santa Teresita, ubicado en barrio 14 de Abril, que se transformó en el singular escenario para el emotivo reencuentro de 13 hombres y mujeres, con corazón de estudiantes.
Así Jorge Mengual, Hugo Zamar, Mirta Cafrune, Nina Rotondo, José Luis Fortunato, Débora Barco, Dante Márquez, Gloria Labra, José Yerrich, Virginia Fernández, Carlos Alberto Veliz, René Clemente y Norma Ponce se confundieron en un abrazo y recibieron con gran afecto, a su querido profesor de Matemática Financiera, Beby Herrera y a la actual directora de la Comercial sampedreña, Patricia Duarte, quienes fueron especialmente invitados y recibieron una mención de honor, haciendo entrega también, de un diploma recordatorio para el establecimiento, en el marco de sus Bodas de Diamante.
"Pasamos un día hermoso, ameno, recordamos los tiempos idos, las anécdotas, 13 pudimos estar presentes. Éramos 32 compañeros y 6 fallecieron. Otros compañeros no pudieron llegar, como José Torino quien es ministro de Salud de Tierra del Fuego y de las Islas del Atlántico Sur, tuvo que viajar a Australia por el casamiento de su hija y por eso no vino. Este año recibimos al profesor Alberto 'Bebi' Herrera y a la actual directora. Lamentamos la ausencia de la profesora Clara de Langhe de Falcone, que no pudo llegar por motivos de salud", sostuvo Carlos Alberto Véliz.
Agregó que recordaron "a los profesores, la señora de Yaradi, profesor José Manuel Crespe, las profesoras María Luz de Taché, Elba Agüero, Gladys de Herrera, Ernestina Acosta. Tuvimos los más grandes profesores de la historia de la escuela de Comercio, por eso salimos todos buenos, nos llamamos los 'tops 3', significa que estamos en tercer lugar en el podio, porque fue una de las promociones más brillantes", comentaron entre picarescas sonrisas. Entre las anécdotas recordaron que para la gira de egresados, comenzaban a juntar el dinero y "era tal la cantidad que nos alcanzaba para la gira, fuimos a las Cataratas de Iguazú, pagamos la Cena Blanca y con el dinero restante donamos libros y banderas a la escuela. Por este encuentro quiero agradecer también a dos amigos Roberto y Pascual que fueron los encargados de hacer el asado que pudimos compartir entre todos", dijo Carlos Véliz.
Sentido de pertenencia
En diálogo con El Tribuno de Jujuy, la directora Patricia Duarte expresó que se sintió muy halagada y orgullosa "por compartir con buenas personas y grandes profesionales, que mostraron con el paso del tiempo, el buen nivel académico de hace 50 años atrás. Eso también llena de orgullo a una escuela con tanta trayectoria y prestigio, porque estamos hablando de una promoción en la que sólo había una sola división de quinto año, hasta ese año. Luego comenzaron a incrementarse, pero en este caso particular, ellos fueron 32 alumnos, que cursaron el secundario en el antiguo edificio (ya demolido) que ubicado en la esquina de Aristóbulo del Valle y Rogelio Leach", dijo.
Expresó su beneplácito por el gesto del afecto, "me recibieron con tanto cariño y pasamos un momento muy agradable, pude sentir y rescato el sentido de pertenencia que a pesar de los año sigue intacto y siguen manteniendo el espíritu de la Comercial. No se olvidan de su escuela, ese amor, esa pasión por haber sido de la Comercial y lo llevan bien marcado, porque hablamos de 50 años y es como si había sido ayer".