El geólogo tucumano Gabriel López Isla, becario del Conicet y doctorando del Instituto Superior de Correlación Geológica (Insugeo), protagonizó uno de los hallazgos paleontológicos más relevantes de los últimos años en Jujuy. En diciembre de 2024 descubrió un conjunto de 532 huellas fósiles de dinosaurios en una remota explanada de la localidad de El Sauzal, en plena selva de las Yungas.
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El geólogo tucumano Gabriel López Isla, becario del Conicet y doctorando del Instituto Superior de Correlación Geológica (Insugeo), protagonizó uno de los hallazgos paleontológicos más relevantes de los últimos años en Jujuy. En diciembre de 2024 descubrió un conjunto de 532 huellas fósiles de dinosaurios en una remota explanada de la localidad de El Sauzal, en plena selva de las Yungas.
El hallazgo fue posible gracias a la colaboración con Julio Sapag, propietario de una finca cercana, quien en 2023 comentó a López Isla sobre la posible existencia de huellas fósiles en su propiedad. Motivados por esta información, planificaron una campaña de exploración para diciembre del 2024 y contaron con apoyo logístico de Salva Aventura, un grupo especializado en rappel y escalada, imprescindible para llegar a esa zona selvática.
"Es bastante difícil llegar al sitio, pero lo hicimos. Y cuando finalmente accedimos al lugar, no podíamos creer lo que veíamos. Pensábamos encontrar unas 10 o 15 huellas, pero contabilizamos exactamente 532 en apenas dos horas de trabajo", relató López Isla, aún sorprendido por la magnitud del hallazgo.
Debido al tiempo limitado que tenían ya que el trekking les llevó gran parte del día, trabajaron por dos horas para regresar antes de que anochezca, y López Isla hizo un registro fotogramétrico del lugar, lo que les permitirá analizar con mayor detalle las huellas desde la oficina y dividieron el grupo en tareas.
López Isla explicó que originalmente creían estar pisando la formación Yacoraite, una unidad geológica conocida por su riqueza , de huellas fósiles, especialmente en la Quebrada de Humahuaca. Pero al llegar a El Sauzal, cerca de Palma Sola, descubrieron que se encontraban sobre la formación Lecho, más antigua. "Hasta ahora, la formación Lecho había registrado apenas cinco huellas de terópodos en el Valle de El Tonco, en Salta. Este nuevo descubrimiento, por lo tanto, posiciona al Este jujeño, específicamente al departamento Santa Bárbara, como una nueva zona de interés paleontológico en el norte argentino", destacó el geólogo.
Este hallazgo fue presentado formalmente en marzo de 2025 durante el V Paleontological Virtual Congress, donde se publicó un primer avance sobre la nueva localidad icnológica de El Sauzal.
López Isla aclaró que aún resta realizar un análisis detallado de los productores de las huellas, aunque ya se pueden inferir algo por el rango temporal en el que se encuentran, el Cretácico Superior, hace unos 70 millones de años, cuando no existían Los Andes. "Se puede atribuir a faunas de hadrosaurios, que son aquellos dinosaurios de pico de pato, se los ubica rápidamente, hay muchas diferencias anatómicas dentro de este grupo y después posiblemente haya huellas de ornitópodos además de los terópodos", dijo.
Además, identificaron huellas tridáctilas, es decir con tres dedos largos y afilados con marcas de garras que posiblemente pertenecen a terópodos, un grupo de dinosaurios carnívoros que incluye a especies como los abelisaurios, típicos del supercontinente Gondwana. "También encontramos huellas indeterminadas, algunas muy grandes de más de 50 cm de largo por 45 cm de ancho, y otras muy pequeñas que aún no fueron contabilizadas por falta de tiempo. Todo esto nos impulsa a organizar una campaña de relevamiento mucho más exhaustiva en el lugar", agregó.
Entre las muestras recolectadas, López Isla destacó una en la que se observan trazas de pequeños invertebrados vermiformes (similares a gusanos), lo que indicaría que el suelo fue en su momento un ambiente altamente productivo en términos orgánicos.
El geólogo también describió las condiciones geológicas del sitio. Se trata de una explanada erosionada por la caída de bloques, cuya superficie conserva huellas redondeadas o subredondeadas, claramente identificables como pisadas de dinosaurios de gran tamaño.
Los estudios estratigráficos del terreno revelaron además la presencia de bivalvos, aunque en capas inferiores a las de las huellas, lo que indica que en algún momento el sitio estuvo asociado a un cuerpo de agua. "Estamos hablando de hace 70 millones de años atrás. Por ejemplo, no existían los Andes, la conexión con el Pacífico era mucho más cercana y generaba estos lugares como planicies continentales de sistemas fluviales que llegaban posiblemente a cuerpos de agua localizados en esa región. Es decir, la paleogeografía era muy distinta a lo que actualmente vemos", explicó.
Frente a la referencia de Salta donde hay registro de pocas huellas, destacó que este descubrimiento es más significativo y posiciona a Jujuy, "a la parte del departamento Santa Bárbara como una nueva región productora de huellas", aunque queda más estudios de campo e investigación por hacer.
Cambió el mapa paleontológico
Este hallazgo es un hito en la carrera del geólogo Gabriel López Isla, quien realiza su doctorado en la Quebrada de Humahuaca, y prevé seguir un posdoctorado centrado en Palma Sola y hacer un relevamiento de huellas fósiles en todo el norte argentino.
Su investigación ampliará el conocimiento sobre la distribución temporal y geográfica de los dinosaurios en Sudamérica. "Antes no se consideraba al Este de Jujuy como una región de interés para el estudio de huellas fósiles. Este hallazgo cambia por completo ese panorama", dijo. La campaña de 2024 la financió por los Proyectos de Investigación Plurianuales (PIP) del Conicet 2022, pero los fondos ya no están disponibles, por lo que anunció que comenzó a gestionar con éxito a fondos internacionales.