El diputado provincial Martín Fellner instó al estricto cumplimiento de la ley sancionada en abril pasado, la cual establece la realización de una campaña de prevención de consumo de alcohol en adolescentes y la intensificación de los controles en lugares de expendio.
"Estas fechas de celebración nos interpelan a trabajar y poner en marcha esta campaña de prevención y monitoreo" enfatizó el legislador.
Sobre este último punto la normativa de su autoría prevé mayores controles en espectáculos públicos y privados, comercios, festividades tradicionales y afines donde se expenden bebidas alcohólicas, a fin de evitar la venta a menores de edad.
"Si la realidad del consumo de alcohol entre nuestros jóvenes ya era preocupante, con datos que ubican a nuestra provincia con niveles superiores al promedio nacional en este indicador, hoy, con diciembre y sus múltiples celebraciones es indispensable que esta ley no se convierta en letra muerta y se ejecute inmediatamente", expresó.
Especialistas sanitarios advirtieron que el consumo de alcohol entre adolescentes se inicia a edades más tempranas, entre los 10 y 12 años, y que un porcentaje significativo de jóvenes presenta patrones de consumo perjudicial que se asocian a mayores riesgos psicosociales y de salud.
En ese sentido consideró necesario cuidar la salud no solo física sino también mental de las juventudes jujeñas. "Debemos advertir a los adolescentes de las consecuencias negativas de tomar alcohol en exceso y el daño que implica no solo para quien consume de más sino también del peligro para la vida de cualquiera que se encuentre con estas personas".
Finalmente Fellner concluyó que no se puede permitir que una normativa sancionada con consenso quede en el papel. "Hago un llamado a los organismos de control y a las fuerzas de seguridad para que, en coordinación con los municipios, implementen operativos de fiscalización y campañas de difusión que acompañen el espíritu de la ley".
La Sociedad Argentina de Pediatría recomienda cero consumo de alcohol antes de los 18 años, ya que interfiere con el desarrollo del cerebro, que termina de madurar a los 20 años.