SILVIA AZURDUY
Padres de alumnos de la escuela Nº 459 "Obispo Palentini" del barrio 25 de Mayo, de la ciudad siderúrgica, demandaron mejoras edilicias, por cuanto el establecimiento tiene problemas en los baños, vicios ocultos (paredes rajadas) y la proliferación de gatos que defecan en las aulas por no contar con los vidrios correspondientes.
Esta semana se reunieron con directivos del establecimiento para buscar una solución a la problemática que genera la falta de mantenimiento del edificio inaugurado en 2009.
El encuentro tuvo lugar el lunes a puerta cerrada en el despacho de dirección de la escuela primaria y solo los padres e integrantes de la cooperadora brindaron declaraciones sobre lo expuesto.
Algunos padres manifestaron su malestar por la proliferación de felinos que defecan y orinan en las aulas, provocando problemas de salud de los niños. "Es prácticamente imposible que nuestros hijos tomen clases en las aulas sucias", denunciaron padres.
Se supo que también reclamaron por el estado de los baños como consecuencia de la falta de mantenimiento de las instalaciones.
No es un reclamo nuevo. La comunidad educativa solicitó desde hace algunos años mejoras en los techos, ventanas y baños, pedido que no tuvo eco favorable de parte de directivos y funcionarios del gobierno provincial.
Juan Saracho, quien participó de la reunión dijo que "los integrantes del Ministerio de Educación se comprometieron a solucionar el problema de la proliferación de los gatos y los temas edilicios que tiene la escuela". Explicó que al estar las ventanas rotas y los picaportes de las puertas en algunos casos no están en condiciones, los felinos que viven en el techo bajan para hacer sus necesidades.
Cabe destacar que la escuela fue diseñada con un patio interno descubierto donde se protegen árboles e inculcan a los niños en el cuidado de las plantas y especies arbóreas.
Las madres y vecinas del lugar lamentaron el estado en que se encuentra la escuela, fruto de una gestión que los propios vecinos hicieron para contar con una escuela primaria en el barrio.
"En algunas aulas tenemos el peligro de derrumbe porque las paredes están rajadas", dijeron, lo que técnicamente se conoce como vicios ocultos.
Pablo Ovejero, integrante de la asociación cooperadora del establecimiento, señaló que "confiamos en lo que nos prometieron, aunque explicaron que todo demanda tiempo por la aprobación de los presupuestos destinados a los arreglos".
Ovejero mencionó que hablaron "con la directora y personal de infraestructura de la provincia. Dijeron qué debemos esperar que se autorice el presupuesto para arreglar las ventanas para evitar que los gatos ingresen al establecimiento", acotó.