Jefferson Bone, jugador Sub-19 de Emelec que ya tuvo entrenamientos esta temporada en el primer equipo, es el elemento que luego de hacerse una cirugía de mandíbula la semana pasada no ha podido recibir el alta aún, ya que el cuadro Millonario no ha pagado los costos de la intervención. El joven elemento es volante extremo y con gran proyección, por lo que Leonel Álvarez ya lo estaba considerando para el 2025.
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Jefferson Bone, jugador Sub-19 de Emelec que ya tuvo entrenamientos esta temporada en el primer equipo, es el elemento que luego de hacerse una cirugía de mandíbula la semana pasada no ha podido recibir el alta aún, ya que el cuadro Millonario no ha pagado los costos de la intervención. El joven elemento es volante extremo y con gran proyección, por lo que Leonel Álvarez ya lo estaba considerando para el 2025.
El Club Sport Emelec, uno de los equipos más populares del fútbol ecuatoriano, atraviesa una de sus peores crisis en los últimos años. La institución eléctrica se encuentra sumida en una profunda crisis dirigencial y financiera que ha puesto en riesgo su estabilidad deportiva y económica.
Una de las principales preocupaciones de la hinchada eléctrica es la abultada deuda que arrastra el club. Millones de dólares en obligaciones pendientes con jugadores, proveedores y entidades financieras han llevado a Emelec a una situación límite. Esta situación ha generado una gran incertidumbre sobre el futuro de la institución y ha puesto en riesgo su participación en competencias internacionales.
La deuda de Emelec se ha visto agravada por diversos factores, entre los que se destacan:
- Mal manejo administrativo: Decisiones equivocadas en materia económica y financiera por parte de las anteriores directivas han generado un desequilibrio en las cuentas del club.
- Incumplimientos contractuales: El club ha tenido problemas para cumplir con los pagos a sus jugadores y proveedores, lo que ha generado conflictos legales y sanciones deportivas.
La crisis económica de Emelec ha ido acompañada de una profunda crisis dirigencial. La falta de liderazgo y la incapacidad para encontrar soluciones a los problemas financieros han generado un clima de incertidumbre y desconfianza entre los hinchas y los socios del club.
Los constantes cambios en la directiva y la falta de un proyecto deportivo a largo plazo han dificultado la planificación y el desarrollo del equipo. Además, la crisis institucional ha generado divisiones entre los distintos sectores del club, lo que ha debilitado aún más a la institución.