El fiscal regional Guillermo Beller, a cargo de la causa contra el presunto asesino serial Matías Jurado (37), ya cuenta con el resultado de la última pericia psiquiátrica rea lizada al acusado, señalado por el crimen de cinco personas en nuestra ciudad capital.
El informe concluyó que Jurado es imputable, según informaron las fuentes judiciales. Se trata de la segunda evaluación de este tipo a la que se sometió el acusado, tras la duda inicial sobre su estado de salud mental. El examen estuvo a cargo de una profesional del Cuerpo de Investigaciones Fiscales de la provincia de Salta y ya forma parte del expediente principal.
Según las fuentes, la conclusión dejó en claro que Jurado comprende la criminalidad de sus actos y podía dirigir sus acciones en el momento de los hechos, lo que descarta su inimputabilidad. Esta prueba complica una posible estrategia de la defensa, que analizaba cuestionar la capacidad mental del imputado como parte de su descargo en la causa De esta manera, en los próximos días se realizará una nueva audiencia imputativa contra Jurado, en la que la fiscalía le atribuirá de manera formal el asesinato de Juan Carlos González, la quinta víctima identificada y que había sido anunciada a fines de septiembre.
Así, el detenido quedará procesado oficialmente por cinco homicidios agravados, siendo las otras víctimas Jorge Omar Anachuri (68), Sergio Alejandro Sosa (25), Miguel Ángel Quispe (60) y Juan José Ponce (51). Por otra parte se supo que la fecha exacta de la audiencia todavía no fue definida. González tenía 60 años. Había sido reportado como desaparecido el 11 de junio pasado en el barrio Coronel Arias de la capital jujeña. La posibilidad de localizar en la vivienda de Jurado restos de sangre de González era concreta para los investigadores a partir de la pista de su teléfono celular: el aparato tuvo un último contacto cerca de ese domicilio. Al allanar la casa, los investigadores encontraron rastros de sangre, restos óseos, ropa presuntamente de las víctimas, también palas, bolsas y una carretilla. Las muestras levantadas en la escena se analizaron y permitieron establecer qué había sucedido con los cinco hombres que habían desaparecido. Todavía restan determinar a quiénes pertenecen otros dos perf iles de ADN más hallados en la vivienda. Hay sospechas de que podrían estar relacionados con personas desaparecidas cuyas familias se encuentran fuera del país, por lo que serán sometidas a nuevos cruzamientos.
Está acusado de al menos cinco asesinatos
Los investigadores sospechan que dentro de la vivienda, Matías Jurado atacó con un mismo puñal a sus víctimas y procedía a descuartizarlas. Este objeto punzante fue hallado en el primer allanamiento, detrás de una pared recién hecha, junto a otros objetos con filos, donde hallaron restos de sangre. Algunos restos humanos fueron enterrados en el mismo domicilio, otros fueron quemados con la f inalidad de reducirlos y parte de ellos se colocaban en bolsas de consorcio que luego eran descartadas en basurales de la zona.
Desde el comienzo de la causa, el sospechoso siempre se pronunció inocente, pero los elementos de pruebas que obran en el expediente, lo ubican como el presunto autor material de al menos cinco asesinatos. Las entrevistas que realizaron a su entorno permitieron establecer que “era una persona muy violenta”, con un frondoso prontuario de antecedentes penales y todo el tiempo estaba armado. “Eso lo han dicho todos. Han coincidido todos: familiares, vecinos, gente que lo conocía de algún merendero donde a veces él frecuentaba, que era una persona muy violenta. Violenta desde la parte física y violenta también desde la intimidación y amenazas con armas”, puntualizó el fiscal regional del Miniosterio Público de la Acusación, Guillermo Beller.
De la misma manera, aseguró que esto se habría probado a través de los informes que se obtuvieron de las veces que cumplió condena en el Servicio Penitenciario. Entre ellas, se conoció un episodio en el que Jurado protagonizó una pelea que lo había dejado herido con un arma blanca en el estómago. Matías Jurado actualmente se encuentra detenido, aislado y monitoreado en el penal Nº 1 del barrio Gorriti de la capital jujeña. Pidió no mantener contacto con los otros internos y no recibir visita de sus familiares. El plazo de prisión preventiva es hasta el 4 de diciembre, pero puede extenderse si la Fiscalía lo solicita, antes de elevar el expediente a juicio oral.