La Justicia argentina lanzó un Alerta Sofía para hallar a Pedro Teodoro Rodríguez Laurta, un nene de 5 años quien habría sido raptado por su padre, Pablo Laurta, señalado como el presunto autor del doble femicidio de su expareja y exsuegra en Córdoba. El hombre, de nacionalidad uruguaya, tiene denuncias por violencia de género.
El perfil del acusado: “varones unidos” y antifeminista
Además de ser conocido en el círculo familiar por haber ejercido violencia y acoso en reiteradas ocasiones contra Luna, Laurta cuenta con un perfil público reconocido en redes sociales por su militancia.
Pablo Laurta sería el creador de una página conocida como “varones unidos”. Este espacio se dedicaba a exponer diferentes casos de supuestas “falsas denuncias de violencia de género” realizadas por mujeres. El grupo manifestaba la necesidad de incorporar la “perspectiva masculina a las discusiones de género”, argumentando que las problemáticas actuales dejan de lado temas que afectan mayormente al hombre, como el fraude parental y la discriminación judicial.
Además, Laurta utilizaba sus redes sociales de manera activa para atacar al feminismo. Entre sus publicaciones más controvertidas, afirmaba que las mujeres que defienden dichos ideales “pronto recibirán lo que merecen”. Además, aseguraba que “No hay futuro para una sociedad donde las mujeres tengan un estatus superior al de los hombres”.
En su perfil, Laurta se mostraba a favor de políticos de derecha como Donald Trump y Javier Milei. También era un defensor del actor Johnny Depp en medio del juicio que enfrentó contra Amber Heard, utilizando ese caso para remarcar la existencia de “denuncias falsas”.
La disputa personal llevada a las redes sociales
El acusado llevó la disputa por la tenencia de su hijo con Luna Giardina al ámbito de su militancia. En la cuenta de X (anteriormente Twitter) de “Varones Unidos”, el posteo fijado era un artículo que exponía su caso particular.
En su relato, Laurta argumentaba que Giardina lo había bloqueado y desaparecido “de forma sorpresiva y sin mediar discusión alguna”. Afirmaba que, posteriormente, comenzó a recibir llamadas de desconocidos que le solicitaban “decenas de miles de dólares para volver a ver a su hijo”, y que fue notificado de una “falsa denuncia” presentada por Giardina.
Laurta sostenía que la negativa de poseer la tenencia de su hijo era un “acto de secuestro legitimado”. Asimismo, exponía que “funcionarias feministas de varias dependencias judiciales coludieron para encubrir los abusos y legitimar el secuestro” del pequeño.
El historial de violencia denunciado por la víctima
Luna Giardina, de 24 años, había realizado una denuncia por violencia de género en contra de Laurta, la cual él insistía en calificar como falsa.
En su presentación judicial, la mujer relató que desde el inicio de la relación, Laurta la manipulaba y la obligaba a hacer cosas que ella no deseaba, incluyendo tener relaciones sexuales cuando no quería. Giardina también denunció que él la forzaba a viajar a Uruguay y que no la dejaba tener redes sociales, celular ni trabajar.
Un punto crucial de la denuncia era el relato de un intento de ahorcamiento, situación que motivó a Giardina a regresar a Córdoba junto a su hijo.