Cuando se trata de demostrar la lealtad y el compañerismo de forma innata y a través del tiempo, los estudiantes de la Escuela de Educación Técnica Nº 1 "Escolástico Zegada" son los que siempre se destacan por la hermandad que saben forjar en el lapso de años de aprendizaje y convivencia compartida.
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Cuando se trata de demostrar la lealtad y el compañerismo de forma innata y a través del tiempo, los estudiantes de la Escuela de Educación Técnica Nº 1 "Escolástico Zegada" son los que siempre se destacan por la hermandad que saben forjar en el lapso de años de aprendizaje y convivencia compartida.
Y es allí, donde se puede ver reflejado el profundo amor y respeto que sienten por la entidad que fue contención. Al ser una de las instituciones educativas más tradicionales por su historia de permanencia centenaria en la provincia, los alumnos que transitaron sus aulas comprenden a la perfección que forman parte de una gran familia, orgullo que portan con un significativo respeto por la entidad que los formó en el área educativa, en valores humanos y, por sobre todo, en el profundo sentido de pertenencia que llevarán por el resto de sus vidas.
Tal es así que cuando se cumplen cuarenta años de egresados, se puede decir que es un sentimiento de identidad que traspasa las barreras del tiempo, gracias a la magia del encuentro permanente que sigue intacto al igual que la energía más fraterna con la que se logró celebrar, recientemente.
Y es que para honrar la amistad de cuarenta y seis años; y ese sentir que vibra al ser "lobos" desde la primera hora en la EET 1, treinta y cuatro estudiantes de 6º 5º de la promoción por el año 1985 en la especialidad Electromecánica; decidieron realizar una obra por el establecimiento referencial. De esa manera, Bernardo Arturo Alancay, José Ramón Jesús Aldonate, Carmen Lidia Arias, Antonio Jorge Arrueta, Isidro Balcarce, Juan Carlos Bautista, Antonio Inocencio Cala, Hernán Rubén Camusso, José Claros Villalba, José Alfredo Chauque, Silvio René Erazo, Gabriel Horacio Gallardo, José Antonio Gómez, Alfonso González, Roberto Flavio Gutiérrez, Abel Jesús Herrera, Luis Eduardo Herrera, Marcela Mónica Junco, Adrián Ariel López, Abel Rolando Mamani, Humberto Esteban Mamani, Javier Mamani, Pablo Fernando Mendivil, Eusebio Montecino, Wilfredo Montesinos, Oscar Nieva, Alejandro Efraín Pérez, Pablo Ramallo, Gustavo Ríos, Ítalo Omar Romero, Julio César Rudek, Dardo Alejandro Salinas, Marcelo Javier Sarapura y Daniel Veizaga volvieron a unirse -esta vez- para efectuar un bien común y retribuir con una remodelación en la estructura de la escuela que los abrazó en su adolescencia y época estudiantil.
El centenario de la Escuela de Educación Técnica Nº 1 "Escolástico Zegada", de 1917 a 2017; fue la motivación para que el grupo de egresados trabajara a fin de enaltecer y rendir tributo a la entidad que los vio crecer.
"Nuestra Enet 1, que antes era nacional, nació en 1917 y en el 2017 cumplió cien años. Nosotros queríamos hacer algo por la escuela que nos dio todo, porque íbamos a la mañana y tarde. A la mañana, a taller y, por la tarde, a las clases. Entonces con los chicos de nuestra promo, especialidad Electromecánica, decidimos colaborar con la restauración del curso que era nuestro. Tenía rotos los vidrios, la pintura estaba deteriorada igual que el piso, los bancos, el pizarrón y las luces; así que quisimos hacer una restauración completa. En ese entonces estaba el director Zambrano. Pudimos restaurar el curso y, al final, le pusimos un nombre; 'Luis Herrera', por nuestro compañero fallecido", destacó José Aldonate, exalumno de 6º 5º de la promoción 1985 – especialidad Electromecánica.
A su vez, este curso resolvió efectuar una placa de reconocimiento en homenaje a los cien años de la EET 1. Así es que el acto de descubrimiento de la placa se concretó el jueves 19 de diciembre gracias a la gestión de José Antonio Gómez, quien es jefe de sector turno noche y que fue parte de la promo 1985; y con la autorización de la vicedirectora, María Luisa Cruz.
Un sinfín de emociones se tejió en los corazones de quienes se congregaron a la cita tras haber sido estudiantes. Volver a respirar el aire en los patios de la escuela que los unió, con la nostalgia que implica recorrer los pasillos y las anécdotas en escaleras y aulas que revela historias en cada átomo de la materia.
Visitar los talleres de las especialidades y contemplar desde el presente aquellos días de juventud, fue una experiencia que los llenó de ternura por la evocación de lo vivido. "José Antonio Gómez es jefe de sector turno noche en la EET1 y el ingeniero Eusebio Montecino quien fue abanderado; ambos compañeros nuestros también estuvieron presentes. La formación que recibimos dio muchos ingenieros, médicos, abogados, pero no dejamos de ser técnicos. Después del acto, nos reunimos para una charla en uno de los cursos de talleres, para ver las posibilidades de seguir ayudando al colegio, aportando y reconectando el vínculo con las instalaciones", reveló Aldonate, quien revivió su tiempo de estudiante en anécdotas que compartió con los demás exalumnos al volver a entrar a su escuela, acción que tocó la fibra más íntima en cada uno de ellos.