Oscar Juárez es un conocido gomero de la ciudad de El Carmen que se desempeña con dedicación en ese oficio hace más de 45 años. Orgullosa de él y de su trabajo, su hija Vanesa Juárez le rindió un sentido homenaje en reconocimiento a su labor y tantos años de servicio a la comunidad.
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Oscar Juárez es un conocido gomero de la ciudad de El Carmen que se desempeña con dedicación en ese oficio hace más de 45 años. Orgullosa de él y de su trabajo, su hija Vanesa Juárez le rindió un sentido homenaje en reconocimiento a su labor y tantos años de servicio a la comunidad.
Con motivo de celebrarse el Día del Trabajador, la joven relató a El Tribuno de Jujuy, las numerosas viviencias de su padre, el popular "Pinocho", tal como se lo conoce en la ciudad de El Carmen.
"Él tuvo su taller Gomería Pinocho durante 45 años y en el mes de marzo pasado decidió cerrar" dijo Vanesa y sus ojos se iluminaron con un brillo especial, pero aclaró que en realidad "lo que cerró no fue solo un negocio, sino un establecimiento de referencia que acogió a varias generaciones de carmenses que lo elegían con seguridad para encontrar las mejores soluciones a sus problemas con los neumáticos, pero también para charlar, compartir y aprender".
Con una marcada seguridad y convicción la joven aclaró que "es por esta notable trayectoria, que no todos pueden presumir de tener ya que no es fácil de alcanzar, que me gustaría compartir brevemente la historia de sus inicios en el rubro de la gomería y lo que constituyó su emotiva despedida".
Según contó, su papá "con 14 años, en marzo de 1977, se iniciaba en este rubro sin saber que sería un largo y fructífero camino. Fueron muchos años de aprendizaje, de siembra y cosecha de amigos y clientes, pero también fueron muchos años de desgaste físico que amerita una merecida licencia".
Sin embargo, a pesar del cansancio acumulado, todos saben del amor que "Pinocho" le tiene a la gomería y cuánto pesó ponerle fecha de caducidad a este trabajo que le permitió crecer como persona y sacar adelante su familia.
"Pinocho se conmueve cada vez que rememora que este trabajo fue la catapulta que le permitió colaborar allá hace unos años con la olla de la abuela y del tío Germán que con tanto amor lo criaron", contó Vanesa.
"Pese a la gran carga emotiva ya que le ganó la emoción y la nostalgia, este marzo de 2022 decidió cerrar sus puertas para concluir una etapa pero para iniciar otra, trabajando desde otro lugar, un lugar menos exigido físicamente que le permita seguir disfrutando de la vida más relajadamente, ya que mi papá se dedicó al trabajo de gomería desde casi niño, ya era hora de ir tomándose un descanso" manifiestó la hija con alegría, tal vez porque de esa manera podrá recuperar un padre.
"El anuncio del cierre fue otra historia" señaló, "para despedirse de sus fieles clientes y amigos, que son muchísimos en la ciudad y la provincia, Pinocho decidió compartir unas breves palabras en redes sociales. Para ello le creamos una cuenta de Facebook a Gomería Pinocho donde recibió abundantes solicitudes de amistad de manera inmediata, intuyo yo que con la intención de permanecer más actualizados con las noticias de la gomería, aunque la verdadera finalidad de esta cuenta era para anunciar la despedida".
"Las repercusiones del anuncio fueron impactantes", expresó Vanesa. "Mucha gente se negó a creerlo y se lamentaron, pero en la misma medida mostraron su profundo agradecimiento por tantos años de servicio y de amistad para con todos los carmenses, que es su comunidad.
Hubo quienes compartieron viejos recuerdos de cuando Pinocho era niño y jugaba en el barrio junto a personas que hoy se admiran de cuánto ha crecido, se rememoraron recuerdos de cuando El Carmen era todavía un pueblito. La gente hablaba de cuando Pinocho se inició en la gomería de la mano de don Coco allá en un tallercito bajo un viejo algarrobo, y hubo quienes destacaron la entrega en la atención a cada vecino y amigo, porque para Pinocho cada persona que llegaba por la gomería era eso antes que cliente".
Las "gracias" llovían, iban y venían, "y esas mismas gracias las dio Pinocho a viva voz el día de su despedida y el pueblo se las devolvió con un amor tan grande y auténtico que no me entra en el pecho tanto orgullo por ser su hija. Siempre lo supimos, pero ese día mi hermana y yo confirmamos que tenemos el mejor ejemplo a seguir como trabajador, pero, sobre todo, como persona" indicó emocionada Vanesa, la hija de Oscar Juárez.