River Plate se consagró nuevamente campeón de la Copa Argentina al vencer ayer en la final a Atlético Tucumán por 2 a 1 en el estadio "Malvinas Argentinas", de Mendoza.
inicia sesión o regístrate.
River Plate se consagró nuevamente campeón de la Copa Argentina al vencer ayer en la final a Atlético Tucumán por 2 a 1 en el estadio "Malvinas Argentinas", de Mendoza.
Ignacio Scocco (10" PT) e Ignacio Fernández (2" ST) marcaron los goles de River, que había salido campeón del certamen el año anterior; Luis "Pulga" Rodríguez (11" PT) estableció el empate transitorio para Atlético Tucumán, que a pesar de la derrota logró la clasificación para la Copa Libertadores 2018.
River se paró en ofensiva con Fernández y Rojas por las bandas y Martínez como acompañante de Scocco en la delantera. Así pudo tener la pelota y merodear el área de Alejandro Sanchez y el gol no tardó en llegar: ante un mal rechazo del arquero Scocco "peinó" la pelota y la dejó en el fondo de la red a los 10 minutos.
Pero la respuesta de Atlético fue inmediata, con una entrada por derecha de Luis Rodríguez y un remate bajo que venció la resistencia de Enrique Bologna.
River volvió a tener el balón a través de Ponzio, Enzo Pérez, Fernández y Martínez y las proyecciones de Gonzalo Montiel. Llegó por la izquierda al promediar la etapa, con un disparo de Scocco apenas desviado y más tarde con un gran pase de Ignacio Fernández que el otro "Nacho" no alcanzó a conectar.
Atlético jugó de contragolpe, con algunos de sus mejores intérpretes como David Barbona, Francisco Grahl y Gervasio Núñez, que por momentos fue un punta más.
Tuvo algunas aproximaciones y entre las más claras se destacaron un remate exigido de Núñez que se fue sobre el travesaño, un cabezazo alto de Cabral y otro de Luis Rodríguez desviado; y terminó el primer tiempo dejando una mejor imagen.
El inicio del complemento fue una continuidad del primero, con River como dueño de la pelota y con otro gol "tempranero", esta vez con un zurdazo del talentoso Ignacio Fernández que se metió en el ángulo superior derecho del arco de Sánchez.
Después, River supo ser amo y señor del segundo tiempo y se llevó la final sin grandes sobresaltos.