El
papa Francisco dijo ayer que "la misión" de cada cristiano es evangelizar entre los pobres, aunque al mismo tiempo subrayó que esta acción no consiste en "hacer asistencia social y mucho menos actividad política". "¿Qué significa evangelizar a los pobres? Significa aproximarse a ellos, servirles, liberarles de su opresión y todo en nombre y con el espíritu de
Cristo", señaló el pontífice en su catequesis previa al tradicional rezo del Ángelus.
En ese marco advirtió, "¡cuidado! No se trata de hacer asistencia social y mucho menos actividad política. Se trata de ofrecer la fuerza del Evangelio de Dios, que convierte los corazones, sana las heridas, transforma las relaciones humanas y sociales de acuerdo a la lógica del amor", dijo.
Por esa razón, la evangelización de los más desfavorecidos de la sociedad es, en opinión del Papa, "la misión de Jesús, de la Iglesia y de cada bautizado". "Ser cristiano y ser misionero es lo mismo. Anunciar el Evangelio, con la palabra y con la vida, es el principal fin de la comunidad cristiana y de cada miembro", aseveró.