En su homilía en la plaza Vittorio, el Papa Francisco conmovió ayer a los piamonteses al recurrir a símbolos fuertes de la cultura regional, de la que su abuela Rosa le hablaba en Buenos Aires cuando él era niño.
inicia sesión o regístrate.
En su homilía en la plaza Vittorio, el Papa Francisco conmovió ayer a los piamonteses al recurrir a símbolos fuertes de la cultura regional, de la que su abuela Rosa le hablaba en Buenos Aires cuando él era niño.
Durante el ángelus, el Santo Padre se ganó muchos aplausos al declararse "nieto" del Piamonte, ante unos 60.000 fieles entusiastas en la plaza Vittorio, en el centro de la ciudad.
También se refirió a la "Consola", virgen muy popular en Turín, "masiva y sin artificios", y citó un poema del escritor local Nino Costa, que describe a los emigrantes piamonteses que partieron hacia Argentina, obstinados, con "pulso firme", "hablan poco, pero saben lo que dicen" y "caminan en adagio (lentamente), pero llegan lejos".
Jorge Bergoglio nació en Buenos Aires en 1936 y, antes de su nacimiento, su familia paterna había dejado Portacomaro, un pueblo del Piamonte, muy cerca de Asti, para instalarse en Argentina.
Con un almuerzo privado con detenidos, personas sin techo y una familia gitana, el Papa celebró el bicentenario de San Juan Bosco, gran figura del catolicismo italiano y del Piamonte, "apóstol de los jóvenes", que se dedicó a la educación de los niños desfavorecidos y fundó la congregación de los salesianos.