El presidente de
Ecuador,
Rafael Correa, dejó provisionalmente sin efecto dos proyectos de ley de impuestos a las herencias y a la
plusvalía que provocaron fuerte resistencia popular y protestas en las calles, con la intención de que el país no viva situaciones de tensión social durante la visita del Papa Francisco, prevista entre el 5 y el 8 de julio próximo.
"He decidido retirar temporalmente los proyectos de ley e invitar a un debate nacional", anunció el mandatario en una cadena de radio y televisión que ofreció ayer por la noche desde el palacio de Gobierno, en la que lució la banda presidencial.
"Queremos que se discuta lo que está detrás de la oposición a estos proyectos", apuntó Correa, quien señaló que actualmente en Ecuador "hay dos visiones de sociedad y hay que desmontar algunas mentiras creadas".
El gobernante reveló que podría archivar definitivamente los proyectos impositivos "si me demuestran que afectan a la clase media".
También retó a la oposición a plantear un referendo revocatorio de su mandato y desafió: "Nos veremos en las urnas para derrotarlos nuevamente". Correa dijo que esa posición no es "soberbia" sino de confianza en el apoyo del pueblo ecuatoriano.