La misteriosa muerte del fiscal Alberto Nisman tres días después de imputar a la presidente Cristina Fernández de Kirchner en la causa por el atentado a la Asociación Mutual Israelita Argentina (Amia) generó un fuerte impacto en la opinión pública.
Tal fue la repercusión del hecho que el tablero político sufrió algunos movimientos y no todas las piezas lograron acomodarse rápidamente. En ese marco, oficialistas y opositores luchan actualmente por alcanzar el mejor escenario con miras a las elecciones en los próximos meses.
Los encuestadores consultados por El Tribuno reflejaron que el oficialismo fue el más perjudicado por el fallecimiento del magistrado que había imputado a la Presidente por "encubrimiento" de los sospechosos del atentado a la Amia.
"Antes de que muera Nisman, el oficialismo ya estaba perdido. No obstante, la muerte del fiscal impulsó una caída de algunos puntos", explicó Jorge Giacobbe (h). Según el gerente de la consultora que lleva ese apellido, "en septiembre sólo el 23% de la opinión pública quería que el oficialismo gane y un 65%, que los kirchneristas pierdan". La última medición que realizó esa consultora indicó que, en el actual contexto, Mauricio Macri resultó el más beneficiado entre los precandidatos "porque la gente lo ve como la antítesis del kirchnerismo, aquel hombre calmo que tiene las soluciones", agregó.
Para el consultor Raúl Aragón, el efecto de la muerte de Nisman no impactó fuerte sobre la imagen del Gobierno pero "sí en la de Cristina Kirchner". "Hablamos de una caída en su imagen de entre 7 y 15 puntos", aclaró el investigador y agregó que "los precandidatos oficialistas no están asociados a Nisman como lo está Cristina". El encuestador precisó que Scioli no resultó perjudicado y que "Massa mantuvo una correcta postura, estuvo a la altura de las circunstancias igual que Macri".
La titular de la consultora Analogías, Analía del Franco, coincidió con los anteriores especialistas en que el efecto Nisman golpeó más a la Presidente, en especial, durante la primera semana posterior al hallazgo del fiscal sin vida. "Hubo una caída de 8 puntos en su imagen, pero repuntó cuando Cristina salió a hablar y comunicó cambios en el área de Inteligencia", aseguró Del Franco.
La especialista en estudios de opinión pública analizó que la Presidente volvió a posicionarse en torno del 48%. "Esto ocurre porque la población no tiene mucho discernimiento sobre lo que sucede. El Gobierno no se paralizó ni perdió gobernabilidad". En relación con los precandidatos de la oposición, la titular de Analogías concluyó que "ninguno obtuvo un caudal grande por lo ocurrido".
La socióloga remarcó que el impacto por la muerte de Nisman tuvo mayor peso en los estratos sociales más altos "porque están más expuestos a los medios".
Según una encuesta de opinión de los consultores González y Valladares, el 50% de los argentinos cree que el caso Nisman no alcanzará la verdad. El 57% considera que los dirigentes opositores no actuaron bien, en tanto que el 95% de los encuestados estaba al tanto de lo ocurrido.
Cambios de discurso
El fallecimiento de Nisman reorientó los discursos de los precandidatos, salvo en el caso de Daniel Scioli que guarda silencio y evita expresarse al respecto.
Los principales referentes de la oposición, Sergio Massa y Mauricio Macri orientaron sus discursos hacia dos temáticas claves: corrupción e institucionalidad.
De ese modo, la inflación que hasta entonces copaba la agenda de los medios, quedó relegada. "Hay una orientación a temas referidos con la independencia del Poder Judicial del Ejecutivo. Si no hubiese pasado lo de Nisman el eje sería otro", explicó Aragón. Para Giacobbe, la gente no se fija en las propuestas, sino "busca gestores".
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La misteriosa muerte del fiscal Alberto Nisman tres días después de imputar a la presidente Cristina Fernández de Kirchner en la causa por el atentado a la Asociación Mutual Israelita Argentina (Amia) generó un fuerte impacto en la opinión pública.
Tal fue la repercusión del hecho que el tablero político sufrió algunos movimientos y no todas las piezas lograron acomodarse rápidamente. En ese marco, oficialistas y opositores luchan actualmente por alcanzar el mejor escenario con miras a las elecciones en los próximos meses.
Los encuestadores consultados por El Tribuno reflejaron que el oficialismo fue el más perjudicado por el fallecimiento del magistrado que había imputado a la Presidente por "encubrimiento" de los sospechosos del atentado a la Amia.
"Antes de que muera Nisman, el oficialismo ya estaba perdido. No obstante, la muerte del fiscal impulsó una caída de algunos puntos", explicó Jorge Giacobbe (h). Según el gerente de la consultora que lleva ese apellido, "en septiembre sólo el 23% de la opinión pública quería que el oficialismo gane y un 65%, que los kirchneristas pierdan". La última medición que realizó esa consultora indicó que, en el actual contexto, Mauricio Macri resultó el más beneficiado entre los precandidatos "porque la gente lo ve como la antítesis del kirchnerismo, aquel hombre calmo que tiene las soluciones", agregó.
Para el consultor Raúl Aragón, el efecto de la muerte de Nisman no impactó fuerte sobre la imagen del Gobierno pero "sí en la de Cristina Kirchner". "Hablamos de una caída en su imagen de entre 7 y 15 puntos", aclaró el investigador y agregó que "los precandidatos oficialistas no están asociados a Nisman como lo está Cristina". El encuestador precisó que Scioli no resultó perjudicado y que "Massa mantuvo una correcta postura, estuvo a la altura de las circunstancias igual que Macri".
La titular de la consultora Analogías, Analía del Franco, coincidió con los anteriores especialistas en que el efecto Nisman golpeó más a la Presidente, en especial, durante la primera semana posterior al hallazgo del fiscal sin vida. "Hubo una caída de 8 puntos en su imagen, pero repuntó cuando Cristina salió a hablar y comunicó cambios en el área de Inteligencia", aseguró Del Franco.
La especialista en estudios de opinión pública analizó que la Presidente volvió a posicionarse en torno del 48%. "Esto ocurre porque la población no tiene mucho discernimiento sobre lo que sucede. El Gobierno no se paralizó ni perdió gobernabilidad". En relación con los precandidatos de la oposición, la titular de Analogías concluyó que "ninguno obtuvo un caudal grande por lo ocurrido".
La socióloga remarcó que el impacto por la muerte de Nisman tuvo mayor peso en los estratos sociales más altos "porque están más expuestos a los medios".
Según una encuesta de opinión de los consultores González y Valladares, el 50% de los argentinos cree que el caso Nisman no alcanzará la verdad. El 57% considera que los dirigentes opositores no actuaron bien, en tanto que el 95% de los encuestados estaba al tanto de lo ocurrido.
Cambios de discurso
El fallecimiento de Nisman reorientó los discursos de los precandidatos, salvo en el caso de Daniel Scioli que guarda silencio y evita expresarse al respecto.
Los principales referentes de la oposición, Sergio Massa y Mauricio Macri orientaron sus discursos hacia dos temáticas claves: corrupción e institucionalidad.
De ese modo, la inflación que hasta entonces copaba la agenda de los medios, quedó relegada. "Hay una orientación a temas referidos con la independencia del Poder Judicial del Ejecutivo. Si no hubiese pasado lo de Nisman el eje sería otro", explicó Aragón. Para Giacobbe, la gente no se fija en las propuestas, sino "busca gestores".
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