El acoso escolar está en el foco del ojo público debido a diversas situaciones captadas por cámaras y viralizadas en las redes sociales, mostrando la cara más cruda de la crueldad adolescente, en este difícil contexto donde menores de edad son los protagonistas de estos hechos, nuestro matutino dialogó con una especialista en adolescentes.
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El acoso escolar está en el foco del ojo público debido a diversas situaciones captadas por cámaras y viralizadas en las redes sociales, mostrando la cara más cruda de la crueldad adolescente, en este difícil contexto donde menores de edad son los protagonistas de estos hechos, nuestro matutino dialogó con una especialista en adolescentes.
La doctora en Psicología, Josefina Lipari, abordó la problemática y explicó que el bullying es "un acoso, que se caracteriza por la agresión, el abuso repetitivo e intencional, y que genera un desequilibrio entre la relación de pares", poniendo a un niño o adolescente en el lugar de víctima y a otro u otros, en el lugar de agresores. La víctima de este agresor, se padece en el proceso graves consecuencias debido al acoso sistemático cotidiano producen consecuencias complicadas, "las víctimas presentan ansiedad, se deprimen, tienen baja autoestima, se aíslan , tienen problemas de sueño y en chicos más grandes, algunas veces hasta surge la ideación suicida", explicó la especialista.
En relación a la problemática a nivel institucional Lipari consideró que "a nivel pedagógico, los docentes tienen que ir viendo y trabajar para detectar este tipo de acoso, sin embargo no solo el docente lo tiene que trabajar sino en la casa también", y remarcó que "es importante también como padres hacer autorreflexión, si nosotros como tales, no estamos validando los logros de nuestros hijos, entonces su autoestima va a ir disminuyendo, va a ir bajando, y va a ser que un niño que no tenga confianza ni en él mismo, ni en nosotros".
Por ello, la profesional evaluó fundamental el trabajo en la autoestima como herramienta clave, "es muy importante que los chicos trabajen su autoestima y que los padres le den esa herramienta y la confianza tanto a los adolescentes".
Sin embargo, Lipari alertó que muchas veces hay niños y adolescentes que no desarrollan el diálogo con sus adultos responsables por eso señaló que "hay chicos que no quieren ir a la escuela porque hay un bullying brutal, eso no solo se fortalece en grupos y ese niño no tiene la capacidad de defenderse, de hablar, de ser escuchado por un adulto, y puede recurrir a otras alternativas que no son sanas".
Finalmente, la especialista resaltó que parte de la solución, yace en el trabajo institucional, de trabajar con los pares, es importante "que ellos sean quienes desactiven justamente estos hechos de bullying", y como padres, se debe educar en la empatía: "Debemos decirle a los chicos si ven estas situaciones, que se involucren, que ofrezcan apoyo, que hablen con las autoridades de la escuela, con el referente", concluyó.
Una línea de escucha y orientación
Existe en Jujuy una línea telefónica gratuita y confidencial, dependiente del Ministerio de Desarrollo Humano de Jujuy. Se trata del 102, un número que funciona las 24 horas para atender situaciones de vulneración de derechos de niños y jóvenes. Ofrece escucha, contención y orientación, a través de operadores capacitados.
No es un dispositivo de recepción de denuncias. Pueden llamar especialmente niños y adolescentes con derechos vulnerados (salud, educación, identidad, maltratos, trabajo infantil u otros), o sus familiares, personas allegadas o cualquier ciudadano que tenga conocimiento o sospecha de una situación de vulneración que puedan estar atravesando un menor de edad. Se puede acceder al servicio desde un celular sin costo marcando el 102 ó a través del teléfono fijo (0388) 4225010.
Una vez que el equipo profesional de la línea 102 toma conocimiento de la situación, interviene un equipo de profesionales interdisciplinarios de la Oficina de Protección de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (OPD) de la jurisdicción de las personas afectadas. La Ley Nacional Nº 26.061 garantiza, protege y restituye los derechos que hayan sido vulnerados y/o amenazados, articulando desde la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia con los demás organismos que integran el Sistema Provincial de Protección de Derechos de los niños y adolescentes.