ABRA PAMPA (Corresponsal). La localidad de Lagunillas del Farallón volvió a convertirse recientemente en epicentro de la tradición y la identidad regional con la realización de la V edición del Festival de la Vicuña y el Gato Andino.
Desde muy temprano, la comunidad se preparó con entusiasmo para este día cargado de significado. A las 10 dio inicio el acto inaugural que contó con la presencia de los abanderados de los niveles primario y secundario, junto a las autoridades educativas de la escuela primaria N° 131 “Guillermo Llampa”, encabezadas por su directora Brenda Encinas, y representantes del Secundario N° 8. También participaron el comisionado municipal Manuel Trejo, el comunero Orlando Vilca, vecinos de la localidad y comunidades invitadas.
Como es tradición en la región, antes de dar inicio a lo planificado para el festival se realizó el pedido de permiso a la Pachamama, un acto de profundo respeto hacia la Madre Tierra.
El primer gran momento de la jornada fue el concurso de gastronomía, donde se presentaron platos típicos de la región, tales como asado a la estaca, kallapurca y empanadas, entre otras delicias. Las recetas, transmitidas de generación en generación, dieron cuenta de la riqueza culinaria de la zona.
Durante la jornada también se destacó la presentación de stands con artesanías locales, donde los artesanos de la zona exhibieron tejidos, cerámicas y trabajos en cuero. Asimismo, el festival contó con la presencia del stand de Parques Nacionales, que brindó información sobre la biodiversidad y la importancia de conservar especies emblemáticas como la vicuña y el gato andino, fortaleciendo el vínculo entre la comunidad y el cuidado del patrimonio natural. Pasado el mediodía, la plaza se llenó de risas y destrezas con los juegos ancestrales. Niños y adultos participaron de la payana y la latincha.
Ya entrada la tarde comenzó el esperado festival artístico. Sobre el escenario se presentaron números locales y actuaciones de las instituciones educativas. El encuentro alcanzó su punto más alto con la actuación de dos grupos estelares, “Dúo Salamanca” y “HukuMallku”, que hicieron vibrar al público con su música.
El cierre estuvo marcado por la tradicional sikuriada. En este marco, la docente Edelmira Eulogia Llampa, oriunda de la localidad y actual presidenta de la comisión manejadora de vicuña en el lugar, destacó la relevancia de estas actividades en la transmisión de la cultura y preservación de la fauna del lugar. “Hoy celebramos con orgullo nuestra quinta edición del Festival de la Vicuña y el Gato Andino, y como hija de esta tierra y presidenta de la comisión manejadora de vicuña, quiero destacar que cada encuentro es un acto de unión y respeto. Pedimos permiso a la Pachamama antes de iniciar porque ella nos sostiene y nos guía; cuidamos nuestras especies como la vicuña y el gato andino, porque son símbolo de nuestra identidad y transmitimos nuestras tradiciones a los niños y jóvenes para que el futuro siga teniendo raíces firmes en esta cultura que nos llena de orgullo”, finalizó.
La V edición del Festival de la Vicuña y el Gato Andino no solo reafirmó el compromiso de Lagunillas del Farallón con sus raíces culturales, sino que también dejó en claro que la tradición sigue siendo un motor de unión y orgullo comunitario, fortalecido por la participación activa de las instituciones educativas.