Definitivamente Gabriel Cartañá cumplió con lo prometido, al presentar en Jujuy su show “Las 5 vidas que vivimos (azar o decisión)”. El mediático psicólogo se encontró en el Teatro Mitre, con el público jujeño que casi llenó la sala. En una entrevista previa con El Tribuno de Jujuy, dijo que se proponía que la gente salga de la sala con algo, que se lleve algo, que pueda dialogar con otros de algo nuevo.
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Definitivamente Gabriel Cartañá cumplió con lo prometido, al presentar en Jujuy su show “Las 5 vidas que vivimos (azar o decisión)”. El mediático psicólogo se encontró en el Teatro Mitre, con el público jujeño que casi llenó la sala. En una entrevista previa con El Tribuno de Jujuy, dijo que se proponía que la gente salga de la sala con algo, que se lleve algo, que pueda dialogar con otros de algo nuevo.
Lo cierto es que lo primero que queda en claro es que en la invitación al teatro para ver a Cartañá, sucede lo mismo que cuando alguien le sugiere a otro que haga terapia, y va por primera vez al psicólogo, van sin saber de qué se trata, por cumplir con el que sugiere, pero con la actitud de “a ver qué me pueden decir a mí”
Cartañá preguntó primeramente “¿quién de acá vino sin saber nada de quien soy, invitado por otra persona?”, y la media era que la mitad va porque lo recontra conocen de la televisión (es panelista en “Bendita TV” de Canal 9), y lo siguen en redes, y la otra mitad no sabe absolutamente nada de él y fue porque le dijeron “vení escuchá”. Y el público fue honesto y levantó la mano. Él también fue muy honesto en muchas expresiones hacia el público, y suena fuerte pero se agradece.
Hizo una exposición muy interactiva sobre cómo y con qué objetivos transitamos nuestra vida. Habló de la muerte y del acompañamiento a quienes saben que van a morir, de lo que debería o sería preferible conseguir en cada una de las vidas que recorremos. De todo lo que influye en la formación de nuestra personalidad, y por qué cada uno de nosotros es totalmente diferente.
El tiempo de construcción, y el del disfrute, en de la vejez, la muerte y la trascendencia, fueron sin dudas tópicos muy fuertes y escuchados con atención. El show es presentado con luces de colores, de una manera muy didáctica y ágil, como la forma de hablar del profesional, y entonces resulta muy llevadero. Y lo logró, la gente salió en grupos, pensando en ir a seguir hablando de estos temas. Muchos de esa platea salimos sabiendo algo más de nuestra psicología. Cada uno lo usará como quiera, como decida, o no lo usará. Pero Cartañá puso su parte. Él dijo en la previa, “el que no sabe, es como el que no ve”. El abrió los ojos, y dio algunos alertas, pero está en cada uno la decisión de los próximos pasos.