Agosto se despidió dejando un imponente paisaje salpicado de lapachos en flor y con ese colorido marco, contrastando el ocre de la vegetación, septiembre se anuncia en el calendario con una importante celebración, el día de nuestra Flor Provincial, la flor del lapacho rosado, la que nos identifica dentro del gran paisaje natural de Argentina.
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Agosto se despidió dejando un imponente paisaje salpicado de lapachos en flor y con ese colorido marco, contrastando el ocre de la vegetación, septiembre se anuncia en el calendario con una importante celebración, el día de nuestra Flor Provincial, la flor del lapacho rosado, la que nos identifica dentro del gran paisaje natural de Argentina.
Fue un sampedreño, Jorge Sammán (p), quien, enamorado de la belleza que ofrenda el lapacho, tuvo la feliz iniciativa, siendo legislador provincial, de presentar un Proyecto Ley ante la Cámara de Diputados que dio origen a la Ley 4383/88, que declaró a la flor del lapacho rosado como nuestra Flor Provincial y designó para su celebración el 1 de septiembre de cada año.
A fines de julio en el Noroeste argentino, el lapacho rosado, como un heraldo anunciador de la pronta llegada de la primavera, desnudo aún de follaje, despliega sus rosadas corolas y convierte a la amplia copa en un inmenso ramo que deslumbra por su gran belleza en toda la región.
Por este singular encanto es uno de los árboles ornamentales más bellos, por lo cual, es cultivado con este fin en gran parte de la Argentina, en los climas templados y cálidos.
El nombre científico del lapacho rosado, es Tabebuia Avellanedae o Impetiginosa, en homenaje al presidente Nicolás Avellaneda, insigne estadista y propulsor de las ciencias en nuestro país, razón por la cual, el botánico Pablo Lorentz, le dio tal denominación. Es originario de la selva tucumano - boliviana y se distribuye en Bolivia y el Noroeste argentino, donde se lo encuentra en los sectores más bajos de las Yungas, así como en su transición con el bosque chaqueño, en las provincias de Salta, Jujuy. Tucumán y el norte de Catamarca.
En nuestra provincia se lo encuentra en los departamentos de San Pedro, Santa Bárbara, Ledesma, El Carmen, San Antonio, Palpalá y Dr. Manuel Belgrano.
Cabe acotar que con el propósito de crear una conciencia forestal y considerando que entre los árboles de la flora regional, el lapacho reunía simbolismos de fortaleza y belleza acordes con la tierra jujeña, el Ejecutivo Provincial, lo declaró Árbol Regional de la Provincia de Jujuy, durante el gobierno de Jorge Villafañe. Se efectivizó la medida mediante el decreto 3622 del 30 de septiembre de 1954.
Existen otras dos especies de lapachos, el lapacho negro o Tabeuia Ipé, más conocido como lapacho crespo o lapacho morado, caracterizado por sus flores de color rosa intenso casi fucsia y el lapacho amarillo o Tabeuia Lapacho.
También, que existe un raro y notable lapacho de flores maravillosamente blancas y de follaje menos abundante. Este lapacho blanco o albino, no es una variedad sino una forma de mutación del lapacho rosado, debido a un gen recesivo, que da origen a estos fantásticos ejemplares híbridos.
Hay un gran anhelo de la comunidad sampedreña, para que desde las escuelas y desde la ciudadanía en general se resignifique esta fecha, que el lapacho sea una especie protegida, y que las autoridades de Ambiente de la Provincia, exijan a la empresa que construye la nueva ruta provincial 34, la reforestación de la flora autóctona que fue arrasada para dar paso al progreso, generando acciones conjuntas con los propietarios de las tierras aledañas a la ruta.
Fueron cientos de especies las que fueron taladas y es prioritario dados el grave impacto ambiental ocasionado, concretar esta demanda para la restitución de la flora nativa a la vera de la ruta.