Independiente se quedó anoche con el clásico de Avellaneda, al derrotar a Racing Club por uno a cero. De esta manera, el equipo de Julio César Falcioni se trepó en solitario a la punta del torneo de la Liga Profesional tras jugarse la quinta fecha. El capitán "rojo", Silvio Romero, fue el autor del único gol; mientras que el jujeño Lucas González tuvo una muy buena actuación.
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Independiente se quedó anoche con el clásico de Avellaneda, al derrotar a Racing Club por uno a cero. De esta manera, el equipo de Julio César Falcioni se trepó en solitario a la punta del torneo de la Liga Profesional tras jugarse la quinta fecha. El capitán "rojo", Silvio Romero, fue el autor del único gol; mientras que el jujeño Lucas González tuvo una muy buena actuación.
La etapa inicial, producto de la torrencial lluvia desatada en Buenos Aires, hizo que el estado del campo "jugara" un papel preponderante. Es que la planificación previo de ambos entrenadores quedó en la nada y pelota hizo lo que quiso.
Y en este contexto la lucha le ganó al fútbol. Recién en el minuto 20, Copetti apareció por el segundo palo después de un centro pasado y casi convirtió. En la acción siguiente, "Licha" López probó desde afuera y también avisó.
A partir de allí, el "rojo" entendió que debía adelantar sus líneas para inquietar al seguro Arias. Así fue que a los 30', el arquero "académico" salió exigido a cortar un centro y dejó el balón servido para Roa, quien de volea estuvo a punto de abrir el marcador. Sin embargo, sobre la línea, apareció Sigali pare evitar la caída.
Luego fue Silvio Romero que no pudo darle dirección a un centro por derecha de Roa, en otra chance neta de festejo.
Sobre el cierre, Correa probó de 25 metros y su tiro se desvió en Barrero. De no ser por la reacción de Sosa, otro hubiese sido el resultado del primer tiempo. Con los pies, el uruguayo impidió el gol.
En el complemento, de entrada, avisó Palacios con un tiro de afuera del área, pero a los 7' Racing armó la mejor jugada del partido, cuando Miranda exigió a Sosa y en el rebote Chacalay reventó el palo. Fue la oportunidad más clara.
Pero en el minuto 23, Palacios arrancó a pura velocidad por derecha, mandó un centro perfecto -previo rebote- y de cabeza Silvio Romero abrió el marcador.
Los minutos fueron pasando con la desesperación de la visita y una férrea defensa del dueño de casa. El "rojo" se agazapó esperando algún contragolpe, que nunca llegó. Aguantó hasta el pitazo final de Federico Tello y festejó largamente bajo el agua. Mientras que del otro lado, se volvió a hablar de la continuidad de Juan Pizzi en el cargo, pudiendo haber novedades en las próximas horas.
Empató Boca Juniors
Boca Juniors y Argentinos Juniors empataron 1 a 1 en medio de un diluvio en “La Bombonera”. La lluvia y los consecuentes charcos que provocaron su intensidad fueron elementos condicionantes en el juego, sobre todo para Argentinos Juniors, que de la mano de Gabriel Milito tiene tendencia a jugar por abajo.
Claro que para Boca también resultó perjudicial porque la mayor lentitud de sus hombres sobre una superficie rápida en algunos sectores con menos agua y lenta en la agotada por los charcos, le terminó jugando en contra. Y aunque Miguel Russo apostó por un poco más de fútbol con la dupla Edwin Cardona-Aaron Molinas, solamente este último hizo pie ante el equipo de un Argentinos que hoy volvió a vestirse con los colores similares a los del seleccionado argentino.
Y en ese devenir del encuentro la visita encontró la ventaja antes de los 20 minutos mediante un tiro libre que pidió y ejecutó muy bien Gabriel Carabajal, cuyo disparó dio en la parte inferior del travesaño, picó sobre la línea y del rebote Matías Romero conectó de cabeza a la red ante la repetida y ya exasperante blandura en la marca de Fabra. Desde allí hasta el final de la primera etapa Argentinos siempre apareció mejor parado en la cancha empapada y al término de esos 45 minutos iniciales justificó la ventaja parcial.
Pero Boca, con más vergüenza que fútbol salió a apretarlo a Argentinos Juniors, aunque con serias dificultades para crear situaciones claras de gol en el segundo tiempo. La igualdad para el local llegó a partir de una pelota parada. Cardona lanzó el balón que rozó la cabeza de Miguel Torrén para establecer el 1 a 1 que sería el resultado final.
